𝕰𝖑 𝕴𝖓𝖋𝖎𝖊𝖗𝖓𝖔 𝕯𝖊 𝕯𝖎𝖆𝖒𝖆𝖓𝖙𝖊

Capítulo 10

Estoy recostado en mi cama cuando escucho voces, bueno, una voz.
Salgo de la cama y tomando mi bastón me dirijo hacia la puerta. No puedo creer que se me está dando muy bien esto de ser un fisgón.

-Si, todo va muy bien, no te preocupes - ¿es Zafiro? ¿Por qué le habla de tú y no de usted? - Estoy bien, no tienes nada de que preocuparte - salgo silenciosamente de mi habitación y me dirijo a la suya, escucharé mejor si estoy más cerca. 

-Claro, te mantendré al tanto de todo ¿cuando vuelves? - hace una pausa esperando la respuesta. - me parece perfecto, pediré un día libre para verte - ¿a quien va  ver? mi corazón comienza a latir rápido ¿qué me pasa? y todo esto ¿a mí que me importa?, doy media vuelta y en ese momento escucho la puerta abrirse a mis espaldas.

-¿Diamante? ¿Qué haces aquí? - Serenity me ha descubierto ¡que vergüenza! Nunca antes en mi vida había hecho algo así.

-Nada - respondo escuetamente. Comienzo a caminar de regreso a mi habitación.

-¿Sabias que escuchar las conversaciones ajenas es de mala educación? - pregunta burlona.

-No estaba escuchando nada, solo estaba caminando un poco - sentencio.

-¡Ah vaya!  y yo que pensé que eras un chismoso... - su voz está en mi oído. Un escalofrío recorre mi cuerpo. No tener el control de lo que estoy sintiendo me hace enfurecer - en primera... - me giro tan bruscamente que choco con ella y caemos ambos al piso. Yo sobre ella.

-¡Auch! - grita al impacto.

-¿Serenity? - pregunto con miedo, temo haberle hecho daño. Parece ser frágil y yo soy más robusto - ¿estás bien? - trató de sostener mi peso en un brazo, mientras con la otra mano localizó su cara, la toco, la recorro.

-Si. - gime.

-¿Te lastimaste algo? - bajo de su cara y buscó su mano. - Perdóname por favor, no era mi intención que esto sucediera. - me preocupa que por mi culpa se haya quebrado un hueso o algo. Estoy entrando en pánico.

-No te preocupes, estoy bien. ¡Solo que estás muy pesado! - inhala y exhala con dificultad.

-¡ah! lo siento... - me hago a un lado y trató de ponerme de pie, pero perdí el sentido de la orientación.  Ella ve mi incertidumbre.

-Ven, dame la mano. - Me sujeta. Se levanta y me ayuda a levantarme.

-Lo lamento enserio ¿dime la verdad ? ¿no te lastimaste? - un miedo me invade.

-No, tranquilo... estoy bien. - me toma de la cara para infundirme tranquilidad, creo. Se lo permito. La verdad es que sí me preocupé. - Ven volvamos a tu habitación. - me entrega el bastón y caminamos de vuelta a mi cuarto.

-No era mi intención escuchar tu llamada... - digo garraspeando - No es un hábito, puedo asegurarlo.

-Tranquilo, no pasa nada. Pero si quieres saber con quien hablaba, era una amiga que regresa a Tokio. Hace mucho que no la veía, sé fue a vivir a Minnesota y me acaba de avisar que pasará unos días aquí, así que me estaba invitando a salir. - explica.

-Si necesitas un día o dos por mi está bien. - La verdad es que trató de parecer tranquilo, pero no lo estoy.

-Tomare solo una tarde pero tú vendrás conmigo...

-¿Cómo que iré contigo? ¿Estás loca?  - Jamás. Esta mujer perdió la cabeza.

-¿Por qué no? Será sólo una hora. Lo prometo - otra vez toma mi mano pero esta vez la deja en medio de las suyas, como si pidiera perdón.

-Ve tú, ya te dije. Si dices que te irás una hora, podré estar bien mientras tanto. No es que me muera si tú no estás... - Resoplo.

-¿Y si sí?

- Y si sí ¿que?  - estoy empezando a perder la paciencia.

-¿Si algo te pasa mientras me ausento una hora? ¿Te imaginas lo que dirá Mina, Seiya y Zafiro? Estás loco...

-Esa falta de respeto... - digo entre dientes.

-Me pasé, lo siento. Pero por favor, por favor, ven conmigo...

-¡Claro que no! - suelto mi mano de un jalón.

-Te propongo algo. Salimos una hora antes de la cita con mi amiga, vamos a donde tú quieras, podremos dar una vuelta por el parque o a donde tú quieras ir, luego, cuando ella llegue le diré que la veré en la cafetería que está cerca de aquí, así podremos estar cerca de casa. Si no quieres sentarte con nosotras puedes sentarte en otra mesa. Cuando haya hablado con ella, regresaremos a casa ¿te parece?

-Hace mucho que no salgo.

-Te hará bien. Ve, te sentó muy bien estar en el jardín esta tarde. Tu piel tiene más color. Anda por favor, si no vas, no iré yo tampoco. Jamás te dejaré solo. - sus últimas palabras me recuerdan a lo que una vez dijo Star. Y al final, sí me quede solo.

-No.

-Está bien. Entonces deja la llamo y le digo que no podré ir. - pareciera que hace un puchero al decir esto.

Tengo ganas de gritar por lo que estoy pensando. Pero... -No la llames, está bien, saldremos.

Un grito de júbilo sale de su boca y me abraza. -Gracias Diamante. Te debo una muy grande. - me suelta y yo por fin puedo respirar.

-Bueno, ahora déjame solo.

-Claro. - está a punto de salir, oigo sus pasos, luego escucho que corre y me planta un beso en la mejilla. - No sabes que importante es para mí esto, muchas gracias.

Mis ojos se han salido de sus órbitas. Estoy en shock. ¿por qué hizo eso? Tan pronto como me dio el beso salió corriendo de la habitación. Me toco la mejilla. ¿Que es esto? Un escozor recorre mi cara, pero no uno malo, más bien uno muy bueno.
No entiendo porque ella se toma esas atribuciones, pero no me molesta.

En los pocos momentos que he pasado con ella me he dado cuenta que es inteligente, fuerte, dulce, su alma es pura. Lo raro es que nunca había pensado en el alma. Si existe, estoy seguro que la mía se perdió hace mucho, hace tres años. 
Pero además de eso, puedo sentir como si algo le pasara. Recuerdo la plática que tuvimos el otro día, cuando me dijo lo de su madre, mencionó una palabra que para ese momento no me interesó "sucia" ¿a que se refería? la única manera en la que una mujer se sientes sucia es... silencio mis pensamientos. No, no, no, si algo así le hubiera pasado ella sería otra, actuaría de otra forma, por el contrario la siento completa, fuerte. Aunque, pensando en la plática que escuché con Mina...  ¡imposible! ¿Cómo alguien podría lastimarla de esa manera? ¿Cómo alguien puede lastimar a cualquier mujer? Eso siempre me ha repugnado de los de mi género. Una mujer es para valorarse, amarse y cuidarse. Y Serenity merece eso y más.
Me sobresalto por mi pensamiento y la emoción que comienza a embargarme.

Después de Star, todo fue oscuridad para mí. Con ella lo perdí todo. A partir del momento en que desperté y descubrí que por mi culpa ya no estaba, comencé a vivir en un infierno, mi infierno.

Me dejé ir en un pozo de completa oscuridad. No sólo perdí mis ojos, perdí mi vida, perdí mi alma.  Star era la luz que me iluminaba y cuando ella se fue, por mi culpa debo decir, se fue mi luz, mi esperanza. La amaba tanto que sentí que merecía lo peor. Pero ahora, después de unos días, empiezo a creer que aún hay esperanza.... que aún hay algo que me puede salvar.

No sé qué me está pasando con Serenity. Apenas lleva dos o tres días aquí y está derrumbando todas mis barreras. ¡Vaya! hasta ha logrado que baje al jardín. Hace tanto tiempo que no lo hacía... Seguro Mina, Seiya y Zafiro se alegrarán de que en tan pocos días Serenity haya hecho maravillas conmigo.