Trato Hecho - Sebastini✔️

C2: Cara a cara

- No lo entiendo—Liliana suspiró. – Después de tanto tiempo, ¿por qué ahora?

- Porque terminaría resultándole extraño que Nicolás comiera todos los sábados fuera de la casa – Tini frunció el ceño. – Pensalo, el comportamiento extraño de su abuelo y si alguien lo vigilo y lo vio con Nico y en esta casa. Solo pudo pensar que se trataba de una amante.

- Bueno, ahí tenés razón – Liliana la miró de reojo. – Pero después de verte, ¿pensar que sos vos?

- Dejemos el tema – Tini miró los papeles que sostenía entre sus manos. – Ahora lo importante es la reunión.

Ambas hermanas entraron a la sala de reuniones, Tini se sentó en su lugar organizando los papeles, mientras Liliana colocaba las botellas de agua alrededor de la mesa.

-Buenos días preciosas – Christian entró sonriente en la sala. – Va a ser un gran día.

- Yo no estaría tan segura – Liliana respondió en voz baja observando como Sebastián entraba en la sala tras Nicolás. – Problemas.

- Buenos días Nicolás – Christian se acercó a él sonriente y le estrechó la mano.

- Hola Christian – Nicolás sonrió y después señaló a su nieto. – Él es Sebastián, mi nieto.

- Oh – Christian se quedó mirándolo un momento a la cara y después estrecho su mano.

- Nicolás – Tini se acercó a él con unos documentos en la mano y se los dio. – Tené, estas son las cláusulas por si querés verlas antes. En cuanto llegue Alonso comenzaremos la reunión, dejaré que él exponga sus condiciones de contrato y después rebatiré hasta conseguir las nuestras.

- Tan impecable como siempre – Nicolás sonrió mirando los papeles, mientras Sebastián se mantenía a su lado sin dejar de analizar a Tini. Se veía tan distinta, con su cabello recogido en una cola, una falda negra, una blusa con reflejos dorados y una chaqueta. Se veía tan profesional, tan perfecta.

- Tini – Christian se acercó a ella y colocó una mano en su espalda. – Sé que tienes asuntos que resolver – él miró de reojo a Sebastián. – Si quieres yo me encargo de la negociación.

- No es necesario – Tini le sonrió, sabía que él se había dado cuenta de quién era Sebastián – Es mi caso y me voy a encargar de él.

- Bien – Christian sonrió y se acercó para susurrarle – Después te invitaré a una copa.

- Buenos días – Alonso, dueño de la inmobiliaria ____ entró a la sala y tras él, sus abogados.

- Buenos días Alonso – Tini se acercó y lo saludo estrechándole la mano, después Christian, Nicolás y Sebastián hicieron lo mismo.– Bueno, comencemos la reunión.

Todos se sentaron en la mesa, Sebastián no dejaba de examinar todos los movimientos de Tini, Christian estaba sentado a su lado y Liliana permanecía de pie con una carpeta con los contratos preparados.

-Estamos dispuestos a escuchar su propuesta de asociación – Christian se dirigió a Alonso y a sus abogados.

Uno de los abogados de Alonso comenzó a hablar, mientras otro de ellos repartía las cláusulas del contrato a cada uno. Diciendo que las ganancias quedarían divididas en un cincuenta por ciento para cada empresa. Y como era de esperarse, Martina no estuvo de acuerdo, así que luego de explicar que la constructora tenía que hacerse cargo de los gastos, llegaron al acuerdo de un setenta por ciento para la constructora y un treinta por ciento para la inmobiliaria. Y mientras, Sebastián parecía sorprendido de ver la soltura con la que Tini se manejaba.