Trato Hecho - Sebastini✔️

C8: Secretos ocultos

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- Hola cielo – Tini cargó a Nico con una sonrisa. – ¿Cómo te fue en el jardín?

- Pinte a papá y a vos – Nico sostenía entre sus manos un folio con su dibujo.

- Qué lindo – Tini trató de sonreír, luego soltó a su hijo en el suelo y tras colgarse su pequeña mochila en el hombro, le agarró la mano para caminar hacia la casa.

El jardín de Nico estaba a quince minutos de su casa, a pie. Tini adoraba ir por su pequeño y hacer ese trayecto con él agarrado de su mano. Cuando entraron a la casa, Nico corrió hacia la sala, ella lo siguió y se quedó parada frente al sofá.

- ¿Juan? – No podía creer lo que estaba viendo, allí estaba él, junto a su hermana y mirando a su hijo.— ¿Qué haces aquí?

- Quería conocer a Nico – Juan Manuel la miró precavido. – Mi abuelo no para de hablar de él.

- Claro – Tini soltó la mochila sobre el sofá y cargó a su hijo en brazos para acercarlo a Juan Manuel, que lo miraba fijamente. — Nico, él es tu tío, Juan Manuel.

- Hola – Nico sonrió mirando curioso a aquel hombre que permanecía frente a él.

- Hola Nico – una leve sonrisa se asomó en el rostro de Juan.

- ¿Por qué no le das un abrazo a tu tío cielo? – Tini sonrió y acercó al niño a los brazos de Juan Manuel, que tras vacilar unos segundos los tendió para cargarlo, después Nico lo abrazó.

- ¿Por qué no te quedas a comer Juan? – Liliana lo miraba con una sonrisa, Tini se sorprendió ante aquella propuesta.

- No quiero molestar – Juan miró a Tini precavido.

- Vos no molestas Juan – Tini sonrió, luego miró a su hermana. — ¿Podés llevar a Nico a lavarse las manos?

- Claro—Lili cargó al niño y se fue con él.

- ¿Querías quedarte a solas conmigo? – Juan Manuel la miró con el ceño fruncido.

- Quiero saber como estás – Tini sonrió y le indicó que se sentara, luego se sentó frente a él. — ¿Ya tenés cita para la reunión de alcohólicos anónimos?

- Si lo que te preocupa es si voy a cumplir mi palabra, no te preocupes—Juan evitó mirarla a la cara. – Esta tarde tengo la primera reunión y ya pedí que se te notificara mi asistencia.

- ¿Vas a ir solo? – Tini frunció el ceño al ver como él asentía. — ¿Querés que te acompañe?

- ¿Acompañarme? – Juan Manuel la miró sorprendido. — ¿Por qué?

- Porque no es un trago fácil de pasar y quizás con apoyo te resulte más sencillo – Tini le sonrió. — ¿Te parece si te acompaño?

- Si eso quieres – él suspiró. — ¿Por qué quieres apoyarme?

- Somos familia, ¿no? – Tini se levantó de su lugar. – Sos el tío de mi hijo y para eso existe la familia, para apoyarse.

- Ya esta – Liliana regresó a la sala con su sobrino agarrado de la mano. – Voy a preparar la comida.

- Yo te ayudo – Tini miró a su pequeño. – Nico, ¿por qué no le enseñas a tu tío tu habitación?

- Vamo tito – Nico agarró a Juan de la mano y jaló de él, este sin poder evitar que una sonrisa se dibujara en su rostro, lo siguió.

En la cocina ambas hermanas preparaban la comida en silencio, aunque Tini no paraba de mirar a su hermana de reojo.

-¿No pensás decirme nada? – Tini miró a Lili con una sonrisa. — ¿A qué venia esa invitación a comer?