C6: La boda

2.6K 227 221
                                    


- Estás muy linda – Liliana miraba a su hermana sonriente.

- Esto no es para mi – Tini se miraba en el espejo, no se reconocía.

Un vestido blanco con un pequeño escote y algo de brillo decorándolo, y una inmensa cola. Su pelo recogido con una diadema de diamantes y oro blanco, y un fino velo con el filo bordado cayendo sobre sus hombros. Aquel collar de diamantes en su cuello y los pendientes a juego. – Necesito estar sola, por favor.

- Esta bien – respondió Lili y salió de la habitación.

Tini se dejo caer en la cama.
¿Cómo había llegado a eso? Toda una semana en la que ni siquiera había podido conocer realmente al hombre con el que estaba a punto de casarse.

Nicolás se había encargado de todo lo relacionado con la boda, absolutamente todo. Le había mandado el vestido, las joyas y no contento con eso, una estilista y claro está un coche y el chófer para llevarla a la casa.

¿Así sería su vida a partir de ahora?

- Tini – su hermana golpeo la puerta. — ¿Estás bien? Tenemos que irnos, llegaras tarde.

La única persona a la que ella había invitado era su hermana, era la única que sabía que se casaba, ni siquiera habían querido contárselo a su madre. Por el contrario, Nicolás había invitado a amigos y accionistas, y ya muchas revistas habían publicado la gran noticia, "el soltero más cotizado de Nueva York se casaba"pero ¿con quién?

Se levantó de la cama, se miró en el espejo una última vez y caminó hacía la puerta, la abrió y se encontró con su hermana, trato de sonreírle, pero no podía.

- Vamos – Liliana la tomo de la mano y caminaron hacia la salida, donde el chófer las estaba esperando.

(...)

- Deja que te ayude – Nicolás sonrió y se acercó a su nieto para anudar su corbata. — ¿Estas nervioso o es impresión mía?

- No estoy nervioso – Sebastián lo miro con el ceño fruncido.

- Tranquilo hermano, lo normal es que lo estés – Juan lo miraba sonriente. – Vas a atar tu vida a una mujer.

- Yo estaría nervioso por ella – Andrés sonrió. – Martina es una increíble mujer.

- Bueno, ya esta bien – Nicolás miro a ambos frunciendo el ceño. – Vayan a recibir a los invitados, quiero hablar a solas con Sebastián.

Espero a que ambos salieran de la habitación y lo miró serio.

- Vas a casarte.

- Si, tú me lo exiges – Sebastián frunció el ceño. — ¿Lo recuerdas?

- No me refiero a eso – Nicolás se sentó en un sofá sin dejar de mirarlo. – El matrimonio implica muchas cosas, entre ellas la fidelidad y desde ya te advierto que no permitiré que le faltes el respeto a Martina revolcándote con cualquier mujerzuela.

- ¿Qué quieres decir? – preguntó Sebastián sorprendido.

- Quiero decir que si le eres infiel a tu esposa, puedes olvidarte de mi casino – Sonrío Nicolás. – Para siempre.

- ¿Tan bien te cae? – Sebastián lo miraba confuso. – Apenas la conoces hace unos días y pareces tenerle bastante cariño.

- Me recuerda a tu abuela – Nicolás suspiro recordando a su mujer. – Nunca le importo el dinero o la posición, solo quería realizarse.

- ¡El juez acaba de llegar! – Andrés gritó al otro lado de la puerta.

(...)

Trato Hecho - Sebastini✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora