Hunting season

Capítulo 05

Habían pasado dos semanas de que Jaehyun hubiera discutido con su familia acerca de presentarles al muchacho.

Ellos ya estaban listos, pero Taeyong todavía no.

El castaño observaba fascinado como iba de un lado a otro en su departamento, tratando de escoger un outfit perfecto para presentarse.

– ¿Qué tal esta? – preguntó a su novio, extendiendo una camisa frente a él.

El menor, que lo miraba desde el sofá, descansando su mentón sobre una mano, sonrió.

– Es perfecta –

El rubio rodó los ojos.

– Eso dices de todas –

– Todo te queda bien – se encogió de hombros.

– Jae – hizo un puchero.

– Bien – se levantó – no iba a dártela hasta esta noche – dijo mientras salía y entraba corriendo en menos de diez segundos – te compré esto – extendió una bolsa de Guess.

El otro lo miró sorprendido antes de arrebatarla de sus manos y apresurarse a ver su contenido.

– ¿Me compraste una chamarra de piel? – preguntó impresionado.

– Es sintética – rió.

– Es increíble – abrazó la prenda – gracias – dijo antes de darle un pico al otro – ¿pero es apropiada para esta noche? Tú siempre vistes tan cool y elegante. No quisiera causar una mala impresión –

– Si te soy honesto, mi familia no espera nada de ti –

– Hey – recriminó indignado.

– Es la verdad – sonrió divertido – eres un humano, cariño. Ellos apenas y verán lo que vistes –

– Cierto – asintió nervioso – fue una pregunta estúpida –

– No lo fue – respondió suavemente, atrayéndolo de la cintura – todas tus preguntas son totalmente válidas –

– Sólo lo dices para tranquilizarme – hizo un puchero.

– No. Lo digo por que es la verdad – aseguró.

Con cuidado, lo besó dulcemente. El mayor suspiró, abrazándolo por el cuello y sintiéndose más calmado.

– Ahora vístete rápido – dijo cuando se separó – o llegaremos tarde. Y a los vampiros no nos gusta la espera –

– ¿Eso es un hecho? –

– Tan sólo imagina vivir todos los años que lo hacemos nosotros. El tiempo pasa lentamente – negó hastiado – a veces se siente eterno. Así que nosotros no jugamos con él –

– Anotado – exclamó entusiasmado antes de correr a su vestidor.

Jaehyun rió por su actitud optimista.

Sólo esperaba que las cosas salieran bien.

El alfa golpeteaba ansiosamente su pie contra el piso.

Donghyuck apretó su mano, en un intento por calmarlo.

– Lo siento – se disculpó el otro.

El menor estaba por responder cuando abrieron la puerta, presentándose dos hombres en elegantes trajes. Uno más joven y conservado que el otro.

Yukhei gruñó.

Estaban en la oficina de un banco. Él definitivamente no esperaba encontrarse con una de esas cosas.