Llegaron a la casa, que estaba completamente en silencio, azotando la puerta y jadeando.
Donghyuck estaba trabajando y YangYang llegaría más tarde, así que sólo estaban ellos.
– ¡Jaemin! – llamó Yukhei.
– El perro no está aquí – respondió alguien, saliendo de la cocina – entre más veo esta pocilga más me motivo a destruirla –
Yukhei caminó hacia él hecho una furia y lo tomó del cuello de la chaqueta.
– ¿Dónde está? –
Mark fingió un puchero.
– No quiero decírtelo –
– ¿Crees que esto es un juego? – gruñó – somos tres. Podemos asesinarte en segundos –
– Pueden – asintió – al igual que nosotros con su pequeño Jimin o como sea que se llame –
El otro lo soltó violentamente.
– ¿Dónde está mi hermano? –
El azabache sonrió.
Estaba divirtiéndose mucho.
Jaemin estaba hecho un ovillo en la esquina de la cama.
Abrazaba sus piernas y tenía la cara escondida entre las rodillas.
Escuchó una ráfaga de viento, pero no levantó la cabeza.
– Te traje comida – dijo uno de ellos, depositando una bolsa de Wendy's en la cama.
– No tengo hambre – murmuró.
– Literalmente puedo escuchar a tu estómago pedir alimento – negó el recién llegado – sólo come, ¿bien? –
Jaemin lo miró finalmente.
– ¿Por qué hacen esto? –
El otro resopló.
– Tu familia acaba de secuestrar a los únicos dos miembros frágiles de la mía – se cruzó de brazos – no te hagas la víctima –
– No querían secuestrarlos – negó cabizbajo – sólo querían hablar –
– ¿Y no pudieron preguntar? –
– ¿Para que nos mandaran al diablo como tu hermano Mark? – espetó – ustedes son horribles –
– No tengo idea de qué estás hablando – frunció el ceño.
– Claro – bufó – pero bueno. Supongo que es la parte humana la que les falta –
El vampiro abrió la boca, pero no pudo decir nada. No tenía argumento en contra.
– Eres Jaemin, ¿verdad? – el de cabello gris asintió sin mirarlo – soy Jeno –
– No me importa –
– ¿Por qué estás triste? – se sentó frente a él.
El otro frunció el ceño.
– ¿Qué? –
– Deberías estar asustado, pero estás triste – explicó – ¿por qué? –
– Eres un fenómeno – gruñó – ¿lees la mente o algo así? –
– Sí – respondió Jeno.
Jaemin jadeó.
– ¿De verdad? –
– No – rió.
El estómago de Jaemin cosquilleó. Frunció el ceño extrañado, pero logró reprimir el sentimiento.
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Hunting season
FanfictionNo eran de clases sociales, razas o preferencias diferentes. Su conflicto principal, eran sus especies. O eras un perro, o eras un muerto. Si eras un humano no había problema, a menos que estuvieras con uno de ellos. NCT OT21 (ya sé, dije que no ib...