Seguía sin estar tan segura de que esa canción era especialmente sobre nosotros, pero habían tantas coincidencia en relación de la canción con lo que había pasado, casi podría decir que no había duda de que era nuestra historia.
De todas maneras, si la canción la escribió pensando en mí, podría haber venido a América. ¡Por dios! no era un bebé. resoplé frustrada. Aquellos pensamiento no me llevaban a ningún lado, excepto al mismo laberinto de mi mente.Pero había alguien que sí podía hacerme saber lo que quería.
El evento terminó, estacioné la camioneta en la acera y bajé de ella para subir rápido las escaleras hasta mi departamento. Miré el reloj, eran las nueve de la noche, allá sería a lo mejor la una o dos de la mañana. Tenía que hablar con Ale, así que esperaría hasta que amaneciera.
No sabía si quería saber, pero necesitaba hacerlo. Estas especulaciones en mi cabeza causaban más dolor que la verdad, fuera cual fuera.
Nueve de la mañana. Era como si contara con un reloj despertador en mi cabeza que me anunciaba la hora en la que tenía que tomar mi computadora e intentar comunicarme con Ale.
Puse mi lap-top en mis piernas; la luz que desprendió al prender me cegó por un momento.
Me conecté y sentí un alivio cuando vi que Ale también lo estaba. No dudé ni un segundo en iniciarle conversación.
-¡Hola!
-¡Hey, hola!
Me contestó al instante.
-¿Cómo está todo allá?
-Bien, supongo. Jin me llevó ayer a un parque, desayunamos juntos y anduvimos por casi toda la cuidad.
Podría apostar a que su rostro dibujaba una sonrisa mientras escribía la respuesta.
-Me alegro mucho, deberas.
-¿Y tú? ¿qué tal? ¿cuándo fue la última vez que hablamos?
-No lo sé, el sábado, creo. Yo estoy bien... mejor.
Me quedé con los dedos indecisos sobre el teclado y luego suspiré. No me quedé despierta hasta las casi cuatro de la mañana para nada, tenía que preguntarlo.
-Dime, Ale. ¿Cómo está Lucy? ¿cómo está... él? ¿sabes algo de ellos?
-____... dijiste que no los mencionarías.
-Por favor, Ale. Necesito saber algo. Mis especulaciones me hacen más daño, por favor.
Esta vez se tardó más en contestar.
-Según Jin, Lucy y Jungkook ya no están juntos. Lucy entra y sale de su departamento sola y de vez en cuando Yoongi la visita.
-¿Y Jungkook?
-____...
-Dime, por favor.
Casi un minuto. ¡¿Por qué esta mujer se tarda tanto en responder?!
-Él se fue.
Al momento de leerlo, mis ojos de abrieron más de lo normal. ¿Se había ido? ¿a dónde? ¿desde cuándo?
-¿____?
Me pregunté cuanto me tardé en responder. O reaccionar.
-¿A dónde fue?
-No lo sé, nadie sabe.
-¿Cuándo se fue?
-____... realmente no lo sé. Cambiemos de tema, por favor.
Acepté, pero luego de ese momento mi mente se desconectó de aquella conversación y empezó a divagar, buscando posibles lugares a los que Jungkook se iría.
Él no vendría a California, eso estaba descartado. ¿Japón?, quizá... México, o más para allá... Chile, Paraguay, Canadá... O a lo mejor no se fue del todo, quizá seguía en Italia; en alguna parte del país. ¡Ya sé! Quizá se fue a algún Estado de América, allí quería irse desde un principio, ¿no?
Un agujero en mi pecho se expandió, agrandando el dolor... él estaba tan lejos...
-¡¡____!!
Casi pude oír la voz de Ale a través de la pantalla de la computadora. Había dejado de escribir y ella esperaba respuestas a la pregunta trivial que me había hecho.
-Perdóname. Luego hablamos, es que Daniel está aquí, ¿recuerdas que te hablé de él? Bueno, tengo que ir a...
Mis dedos vacilaron.
-... escoger fotos del trabajo que tuvimos, nos vemos.
No me gusta mentirle a nadie, ni siquiera a distancia; pero tenía que ordenar el desorden en mi cabeza y encontrar alguna forma de ignorar el hueco en mi pecho, que se iba haciendo más grande conforme se producían más pensamientos en mi cabeza.
-Oh... bueno, está bien. Extraño verte por aquí y ser yo quién revele tus fotografías. Te extraño mucho.
-Yo también te extraño. Bueno, te quiero. Hasta pronto.
Me desconecté en seguida.
Dejé la lap-top a un lado y me puse a reflexionar más a fondo, aunque me doliera pensar en la posibilidad de que él estuviera lejos; más allá del otro lado del mundo.
Estados Unidos... irse allá para alejarse del problema en que yo lo metí, para alejarse de Lucy... De pronto, otra chispa de reflexión me hizo percatarme de algo que Ale me había escrito y que me había pasado desapercibido: Lucy y Jungkook ya no estaban juntos... Lucy y Yoongi...
Allí había dos cosas por comprender. Por supuesto, si Jungkook se había ido es porque ya no estaba con Lucy, lógico. Pero, ¿Yoongi visitaba a Lucy? Bueno, era normal que Yoongi visitara a Lucy; yo sabía que la amaba y estaba enamorado de ella, pero... ¿ya le habrá dicho? probablemente no, Yoongi es prudente y a lo mejor no sería adecuado declararse a alguien después de una tragedia como la que sucedió, aunque haya pasado un mes.
Aquello me hizo pensar de nuevo en Lucy, la extrañaba, la extrañaba demasiado. Y cada una de sus risas que se proyectaban en mi mente como un recuerdo, dolían, porque sabía que ahora quizá ya no aparecerían o ya no serían causadas por mí.
No podía fingir que no pasaba nada, ni tampoco podía ignorar el hueco en mi pecho que a cada minuto se hacía más grande. Ya no estaba segura si todo lo que yo tenía adentro seguía allí o si aquel hoyo negro ya los había consumido.
El tiempo no cura nada.
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ᴇʟ ᴍᴀɴᴜᴀʟ ᴅᴇ ʟᴏ ᴘʀᴏʜɪʙɪᴅᴏ [ᴊᴇᴏɴ ᴊᴜɴɢᴋᴏᴏᴋ]
FanfictionDe todas las situaciones desastrosas que pueden existir, yo era dueña de la única que todo el mundo evitaría a toda costa. Lo peor era que esta no era una película, en la que el objetivo es sólo actuar y fingir; lo terrible es que esto es la vida re...