T/n una joven de 23 años de edad, vivía con una típica rutina que consistía en ir del trabajo a casa y ocasionales salidas. Harta de la monotonía de su vida cotidiana y de soledad que está implicaba, decidió adoptar a un pequeño felino para hacerle...
Jisoo:- Nos vamos Yoongi – habló al tomar del brazo al chico.
T/N le dedicó una mirada seria y fría, sabía perfectamente su postura y no le ayudaría a romperle el corazón a su amiga, pero Suga ni siquiera quería ir de nuevo a la casa de Jisoo. Quería irse a la suya con T/N.
Suga:- Sí, pero T/N no se puede ir sola – dijo a modo de pretexto.
Namjoon:- No te preocupes por ella, ustedes vallan a cenar y yo acompaño a T/N a su casa – se ofreció en cuanto escucho a Suga.
T/N:– Supongo que con eso estaremos bien, suerte – deseó la menor del grupo al tomar del brazo a Nam y comenzar a caminar.
Yoon veia molesto como su dueña se iba con otro, dejándolo a él en manos de otra. Su fastidio no era solo por el apestoso olor a perro que quedaría en el departamento y en T/N, si no también porque Nam pareciera querer robarle el lugar que le pertenece.
Jisoo:- Se ven lindos, quizá algún día podamos tener una cita doble con ellos – ese comentario resultó tan pesado para Suga, que se soltó del agarre de la chica – ehh... Vamos se nos hace tarde – nerviosa tomó la mano del hombre y se encaminaron a su casa.
Esa noche sería movida para ambos, tanto T/N como Suga deberán pasar una noche larga y llena de verdades. Pero ¿con quien empezar?.
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Narra T/N
Después de caminar unas cuantas cuadras llegamos a mi edificio, habíamos perdido el transporte público por culpa de Nam, quien en cuanto olfateo los pollos quiso uno. Al llegar a la puerta de mi departamento pensé que Nam se iría, pero no fue así.
En cuanto abrí la puerta, él se adentro a la cocina para servir el pollo preparado que había comprado. Dejé pasar aquello y fui en busca de unas pantuflas para que pudiera estar más cómodo.
Namjoon:- Mmm~... Es tan bueno como huele – dijo al saborear el platillo.
T/N:– Me imagino que tienes un muy buen olfato – mencioné al sentarme con él en la sala.
Namjoon:- Olfato y oído, soy un perro así que es obvió – aclaró aún comiendo del plato – ¡perdoná! ¿Quieres? – me ofreció.
T/N:– No gracias – rechacé, ahora estoy interesada en otra cosa – oye Nam, ¿qué es lo que me puedes decir tú? – pregunté sería.
Vi como la cabeza de Nam iba de un lado a otro negándose a mi petición. Se que sería difícil hacer hablar a Suga, pero Nam era más permisivo y creía que al tomarlo con la guardia baja él me confesara algo.
Pero ahora veo que es tan impenetrable como lo es mi gato. Gato, ¿será que solo miro a Yoongi como mi mascota?
Namjoon:- Sé que quieres descubrir todo lo que pasó antes en la vida de él, pero no me corresponde a mí hacerlo – expreso sin ánimo – sin embargo, algo que sí puedo decirte son cosas de los híbridos en general – asentí en seguida, cualquier cosa me era útil por ahora – esta bien... Lo único que te puedo decir es que el odio que Yoongi me tiene, va más allá de el ser perros y gatos – comentó dejándome confundida.
