T/n una joven de 23 años de edad, vivía con una típica rutina que consistía en ir del trabajo a casa y ocasionales salidas. Harta de la monotonía de su vida cotidiana y de soledad que está implicaba, decidió adoptar a un pequeño felino para hacerle...
La joven pareja no entabló ningún tipo de conversación ese día. YoonGi a penas espero para llegar al departamento de la menor, para después encerrarse en la habitación.
No era su intención el lastimar a la chica que le había demostrado que no todo será malo en esta vida, sin embargo tampoco quería cambiar su relación con ella.
Por otro lado T/N no sabía a que pensamientos hacerles caso. Si Hoseok le diera un consejo en esos momentos, seguramente seria algo del estilo – "Tú has hecho lo que sentías, no te amargues por alguien que no sabe apreciar un sentimiento genuino." – siempre tratando de animarle.
Pero en estos momentos su mente no podía dejar de ser pesimista – ¡Perfecto T/N! La cagaste – no tenía que ser tan dura con ella misma, pero debía reconocer que se había precipitado demasiado.
Sea lo que sea que pensarán ambos sobre la situación, no tenían humor ni cabeza para hablar. Siempre hay que darle tiempo a las cosas, pero no demasiado.
Por lo que la más joven le dio su espacio a Suga, debían de asimilarlo detenidamente o al menos él. T/N estaba segura de sus sentimientos por YoonGi, pero él por su reacción no pareciera estar en la misma sintonia.
Sin embargo, el ambiente tenso no se podía ignorar fácilmente. YoonGi estaba recostado en la sala mirando el televisor sin hacer ni decir nada, cosa que para su compañera era desesperante.
T/N:– ¡Se me antojó una pizza! – soltó casi en un grito al cerrar el refrigerador – ya regresó – aviso tomando las llaves y salir del departamento.
Por su parte Suga no pudo evitar el percatarse del tono de voz de su dueña. Estaba nerviosa y podía apostar a que estaría un tanto dolida, todo porque él le había ignorado.
Suga:- Tan bien que estábamos, y esto lo vino a joder – dijo para si mismo con molestia, a la vez que se masajeaba su frente – será mejor decirle la verdad...
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T/N:– ¡Tonta! ¡Tonta! – ni para ofenderse a si misma tenía energía – pero es lo que necesitaba para sentirme mejor, Hoseok me dijo que no dudará.
Alguna vez sintieron las ganas de mandar todo al carajo. Las opiniones de la gente, los problemas, las consecuencias de estos, sus pensamientos, etc.
Pues este es uno de esos momentos para T/N. La joven en verdad quería olvidar todo lo malo que rondaba en su cabeza y actuar como si nada hubiera ocurrido.
Sin embargo, esa sería la escapatoria más fácil, la más cobarde.
T/N:– Me da una mediana de peperoni – ordenó al llegar al mostrador.
Sí bien parecía excusa, no lo era. T/N amaba la pizza así que comerla le ayudaría a relajarse, además que era una comida que no había probado el albino.
A los 20 minutos de espera su orden ya estaba lista por lo que sin más partió rumbo al departamento.
T/N:– Le daré su espacio, no ganó nada hostigandole – dijo para sí misma, aunque un enérgico cachorro la había escuchado.
Namjoon había aparecido en su forma perruna ante los pies de la chica, sin embargo no se veía del todo alegré. La fémina enseguida noto al can pero aún dudaba de que fuera su amigo, podría ser cualquier perro.
T/N:– ¿Namjoon eres tú? – un ladrido fue su respuesta y no necesitó más que eso.
La pizza se enfriaria si no continuaba con su recorrido, por lo que se limitó a dejar unas cuantas caricias en la cabeza de Nam antes de volver a seguir.
El cachorro por su parte siguió con su paseó, era extraño para él que a pesar de haber nacido como un niño normal, su forma de perro le era más cómoda que cualquiera de las otras dos.
En fin, él sólo era un cachorro que paseaba y recibía caricias de todo aquel que apreciará lo hermoso que era como un ejemplar de raza.
T/N sólo miraba como su amigo disfrutaba de su tarde, ¿cómo era que Nam era tan despreocupado? Tal vez sería buena idea pedirle un consejo.
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No pasó mucho tiempo para que T/N llegará a su departamento. Al entrar no encontró a Suga por ningún sitio frente a ella, así que nuestra protagonista se dirigió directamente a la cocina para así servirse un poco de aquello que tanto le gustaba.
Mientras que la chica aún mantiene sus sentimientos y pensamientos en una pequeña riña por decidir a quien seguir después de lo ocurrido, cierto albino había percibido el rico aroma de aquella caja cuadrada y plana.
En silencio y sin ser notado por T/N que seguía hundida en sus pensamientos a la vez que preparaba todo para comer.
Suga no quiso hablar y hacerce presente ante la chica, pero como ignorar el delicioso aroma de aquel alimento que no había probado en mucho tiempo.
Así que sin esperar más, simplemente tomó lugar en la mesa y tomó una rebanada.
Suga:- ¡Ahg! – Se quejo al quemarse con la pizza.
Ya sea por sus quejidos o el ruido que hizo al tomar lugar, T/N enseguida noto al chico. Naturalmente la chica soltó una carcajada por las quejas de Suga, quien enseguida le miró molesto.
Así fue como la tensión entre la pareja se fue tan rápidamente como llegó en aquel momento, solo hacía falta una risa para aligerar el ambiente y que todo fluyera mejor.
Ambos comieron juntos y como era de esperar Suga casi se termina toda la pizza el solo, acto que T/N le recriminó tan pronto como pudo antes de que el mayor se acabará todas las rebanadas.
"Por lo menos no esta incómodo, que bueno" – pensó T/N al ver la actitud de Yoon, algo que le quitaba un gran peso mental de encima.
"¿Cómo le digo?... ¿Cómo le cuento lo de Hyesoo?" – era lo que atormentaba al albino.
Ya ninguno debía de preocuparse más. Después de ese día los secretos y verdades saldrían a la luz, una detrás de otra.
