The Savior Girl

Capítulo 63

Estoy sentada en las últimas sillas del pequeño salón en donde se hacen los consejos. Rick está sentando en el centro de la mesa principal, toda su expresión corporal indica que esta hecho una furia pero sus ojos lo delatan, está más preocupado que enojado, pero solo yo puedo notar eso.

Frente a la mesa hay una chica menuda. Es flaca, demasiado flaca y tiene en cabello negro por los hombros. Puedo ver como su figura tiembla ante la pregunta de Rick.

-Donde está tu grupo?

Pero ella se limita a bajar la mirada y a guardar silencio.

Daryl y Michonne llegaron esta mañana de Hilltop, donde el grupo que Carl y Judith salvaron en el bosque van a poder tener una nueva oportunidad allá. De camino se encontraron con los mismos caminantes que Rosita, Eugene y yo. Y no. No son caminantes. Lograron matar a unos cuantos que les iban a atacar pero esta chica se rindió. Entrego su arma y se quitó su máscara. La cual ahora Rick tiene en su mano mientras trata de que hable.

-Porque usan mascaras? Le pregunta ahora. Pero consigue lo mismo que en la pregunta anterior, nada.

-Tal vez deberíamos dejarla que descanse un poco. Digo en voz alta, ganando que todos vuelvan a ver para atrás en mi dirección. Me pongo de pie, -Es evidente que está cansada y tal vez con hambre. Podemos intentarlo de nuevo mañana.

Rick pone la máscara en la mesa y se pone de pie.

-De acuerdo. Dice. –Mañana. Y seguidamente se dispone a dejar la mesa, seguido por los demás miembros del consejo.

Daryl se acerca a la chica y la toma del brazo de manera brusca. Lo sigo mirándolo mal, no tiene por qué ser tan brusco. Llegamos hasta la que fue la antigua celda de Negan y la empuja hacia dentro para proceder a cerrarla.

-Le traeré algo de comida. Me dice antes de salir de la celda.

La chica está hecha una bolita en el suelo. Abraza sus rodillas hasta su pecho mientras mira fijamente al suelo.

-Aquí estas a salvo. Le digo mientras me siento en la misma silla donde tantas veces pase horas con Negan. Ella no dice nada.

-Mi nombre es Grey.. Grey Miller y el tuyo? Le pregunto de forma amable tratando de lograr algún avance. Levanta su mirada con algo de temor y me mira.

-Lydia. Me dice en voz bajita.

-Es un lindo nombre, le digo mientras acerco un poco más la silla a los barrotes de la celda.

-Por qué ese hombre es así? Me pregunta y relaciono que se refiere a Daryl.

-Lo siento, a veces tiene mal carácter pero es una buena persona y es un excelente arquero.

-No. No él. El tipo que me hacia todas esas preguntas. Y ahora sé que habla de Rick.

-Solo está preocupado por la seguridad de nuestro grupo y de la comunidad y de todos los que viven aquí. Créeme no es un mal tipo. Cuantos años tienes Lydia?

-No lo sé. Mi mamá dice que eso ya no es importante. Que ya no hay fechas, ni horas, ni cumpleaños. Que ahora todo es como debió haber sido siempre. Me explica mientras noto relaja un poco más su postura.

-Y tu mamá es la líder de su grupo? Le pregunto tratando de aprovechar la confianza que siento que voy ganando.

-Sí, es nuestra Alpha. Me responde cortante.

-Ya. Y tienen un Beta y Gamma? Le pregunto en tono de broma ante el ridículo apodo de su madre.

-Si. Me responde. –Beta es el segundo al mando y Gamma el tercero.

-De acuerdo, tiene sentido. Le digo borrando la sonrisa de mi rostro. –Porque tienen un tercero al mando? Tantos son en tu grupo?

-Él es más como el tipo de los recados y se encarga de reunir a los guardianes. Me explica. Ignorando mi pregunta original.

-Guardianes? Le pregunto con auténtica curiosidad.

-Para ustedes son solo caminantes, para nosotros son quienes nos mantienen a salvo. Guardianes. Me explica.

-Comprendo. Y tu mamá tiene otro nombre? Los otros tipos? Le pregunto.

-No, los nombres son del viejo mundo. Me dice, -Aunque Gamma no siempre fue Gamma. Cuando llego tenía otro nombre, solo que yo era muy pequeña y no lo recuerdo.

-Está bien, no es necesario que te esfuerces por recordarlo. –Daryl vendrá pronto con comida, cómela y descansa. Mañana será un largo de día si no cooperas Lydia. Le digo mientras me pongo de pie y pongo la silla en su lugar.

-Cual dijiste que era tu nombre? Me pregunta mientras se pone de pie. Y se acerca a paso lento hacia los barrotes.

-Grey, le respondo con una leve sonrisa, tratando de que me siga teniendo confianza.

-A veces él dice ese nombre en sueños. Casi nunca puedo dormir, entonces escucho cuando habla en sueños. Menciona ese nombre, tu nombre.