The Savior Girl

Capítulo 45

(Narra Negan)

Tres días antes... 

-Sé que me estas escuchando, abre los ojos Negan. Escucho la irritante voz de Rick.

-Nunca dije que no lo estuviera haciendo, le respondo con una sonrisa en mi rostro mientras abro mis ojos y trato de incorporarme en la cama. Soy consciente de donde estoy, que ha pasado y lo que le hice a ella. 

 –Como esta ella? Me arriesgo a preguntar, sabiendo que la respuesta no puede ser la que esté esperando.

-Viva.. Apenas. Y no gracias a ti. Me responde Rick insolentemente. Como lo odio. Necesito verla.

-Quiero verla. Le digo seco, mientras lo miro fijamente, -No creíste enserio que la iba a matar? O si Ricky?

Lo cierto es que nunca supe que tan profundo había sido el corte, se movió tan repentinamente que no me dio tiempo de quitar el cuchillo de su cuello. 

-Claro, y es por eso que solo esta media muerta? Tuvo suerte que el corte no fue muy profundo y que Daryl la vio a tiempo.

-Quiero verla. Le exijo mientras trato nuevamente de incorporarme en la cama sin éxito, ya que noto como mis piernas están atadas a la misma. –Sera mejor que me desates y me lleves con ella buen Rick, no quiero que las cosas se pongan feas de nuevo. Le trato de explicar con calma. Rick se acerca a la cama con una sonrisa cínica en su rostro, que en todo este tiempo nunca había visto, cree que tiene las de ganar.

-Esto es lo que va a pasar, comienza a hablar cuando esta cerca de mí, -Te vas a pudrir en una celda, serás la prueba de que podemos ser civilizados nuevamente y en todo ese tiempo no vas a respirar ni siquiera el mismo aire de que Grey. Con el tiempo, si te portas bien tal vez considere que puedas sernos útil.

Termina de hablar mientras sigue con esa sonrisa que me está reventando las pelotas.

-De acuerdo Ricky, tú ganaste. Eres el rey de la puta montaña, pero si quieres que coopere y sea tu perrito faldero.. No me deja terminar.

-No te vas acercar a ella. Borra toda sonrisa de su cara y aprieta los dientes. Demonios, que tiene esta chica para que ambos estemos como imbéciles?

Sin decir más sale de la habitación dejándome atado, solo y con una impotencia.

-Púdrete! Le alcanzo a gritar mientras me esfuerzo por zafarme de las ataduras de mis piernas. Dejo de forcejear cuando escucho como la puerta se abre de nuevo. –Pero miren a quien tenemos aquí. Finjo sorpresa.

-Te menciona en sueños. Comienza a hablar mientras se acerca a la cama, -Luego de que Tara detuviera la hemorragia y le dieran puntos cayo inconsciente, pero habla en sueños. Estuve con ella lo suficiente.

-Porque me dices eso niño? Le pregunto entrecerrando los ojos con sospecha mientras me muerdo la lengua por hacerle más preguntas.

-Se que quieres verla, y no sé por qué tengo la impresión que ella también te quiere ver, por mas retorcido que todo esto parezca, al parecer le importas. Y por cómo te pusiste hace unos minutos con mi papá a ti también.

-Que tramas mini asesino? Le pregunto de nuevo esta vez tratando de sentarme en la cama, esto se está poniendo interesante.

-Papá me dejo a cargo de vigilar la enfermería, estas en ella. Grey está en la habitación del lado.

Sin darme cuenta hago fuerza para soltarme las piernas pero es inútil.

-Mira niño..

-Te amarrare las manos y te soltare las piernas, no dudes que no te meteré una bala entre las cejas Negan si intentas lo que sea.

-Mírate! Todo un hombre de negocios, le digo con fingida sorpresa mientras junto mis manos para que las amarre. Carl no dice nada, mientras me amarra las manos y suelta mis piernas. Me alcanza mis botas y a cómo puedo me las pongo. Escucho como le quita el seguro a su pistola y sé que no está bromeando.

-La habitación de la derecha. Me dice mientras atravieso mi habitación hacia la salida. En un segundo podría intentar quitarle el arma, posiblemente unos disparos perdidos saldrían pero le ganaría en segundos. Pero nada de eso pasa por mi cabeza cuando llego a la habitación del lado y la veo tendida en la cama, con una vía en su mano y pálida como la maldita sabana que la cubre.

-Demonios niña. Susurro para mí mientras me acerco hasta su cama y tomo su mano. –Por que fuiste tan estúpida eh? Le pregunto con la esperanza de que me responda y me mande a la mierda. Busco a Carl con la mirada, y este está en el marco de la puerta con su arma en alto, listo para disparar ante cualquier movimiento inesperado de mi parte. –Relájate niño. Le digo mientras pongo toda mi atención en la chica media muerta que esta frente a mí.

Viéndola así, es inevitable que Lucille no llegue a mi mente. Siento como los ojos me pican, los cierro con fuerza. –No seas pendejo. Los abro de nuevo y mi mano va de su mano a su frente, de la cual corro algunos mechones. Su gesto es molesto, pero pacifico como si nada más importara. –Lo siento tanto nena, nunca fue mi intención hacerte daño. Le digo mientras la sigo acariciando con ternura. –Eres una maldita con ovarios de acero, saldrás de esta.

-Bien, se acabo. Ella necesita descansar y la verdad es que tú también, tenías un buen corte en la pierna. Demonios es cierto, no había sentido nada antes de que Carl lo mencionara. 

Sonrió de lado mientras miro donde tengo la venda. –Cortesía de tu amiga aquí presente. Le digo a Carl mientras me vuelvo hacia donde esta ella.

Sin pensar en mis actos me inclino y pego mis labios en su frente. Cierro mis ojos con fuerza ante el tacto. 

–Mierda. Creo que te amo.