Sympathy for the devil ━━ [Finalizado] 《6》

14. Buscando a (Tn) (Borrador)

—Confía en mi mi amor, te prometo que solucionaré esto. —dijo al sentarse con ella sobre su regazo. Con ambas manos, la tomó de las mejillas y le recalcó—: Sin llorar Ardilla, vivimos en un mundo donde no puedes permitirte ser débil, además... tengo todo planeado. No dejaré que una estúpida enfermedad te arrebate de mi lado. Y no sólo tengo un plan... tengo varios. No te dejaré irte de mi como si nada, ¿entiendes? —(Tn) asintió, y Doflamingo le besó los párpados, llevándose con sus labios esas lágrimas de desconsuelo que le partían el alma—. Eres mía y nadie te quitara de mi. —continuó besándole la frente, la quijada, la punta de la nariz, y al rozar sus labios con los de ella..., el rubio le dejó sentir cuánto la amaba, cuanto la necesitaba, cuánto la deseaba, pero sobre todo... le transmitió tranquilidad, y seguridad—. Te amo (Tn). —le susurró en los labios.

—Te amo Doffy.

Chocaron sus labios nuevamente y se dejaron llevar por la pasión y el deseo... (Tn) se puso de rodillas sobre el colchón, para lograr encajarse en la cintura del rubio y así sentarse sobre él, de una manera más cómoda para seguir devorándose como si fuese la última vez.
Pero ese momento tan apasionado e intimo que se estaba dando entre ambos, fue abruptamente interrumpido por alguien que tocaba a la puerta...

Toc, Toc...

—Joven amo, siento molestarlo pero tiene una llamada urgente. —avisó Baby-5 desde afuera.

Doflamingo hacía caso omiso a las palabras de la muchacha, pero a causa de esto, (Tn) cortó el beso.

—¿No irás a atender?

—No me importa nada más que no seas tú. —dijo al besarla apasionadamente de nuevo.

—Joven amo es alguien de los Shichibukai... —Insistió Baby-5 al no recibir respuesta.

«¿Será ese maldito?» Pensó alarmado. Pero no quería dejar ir los labios de (Tn).

—Doffy mejor ve a ver que sucede.

a Doflamingo poco le importaba el resto del mundo, pero pensar que existía la posibilidad de que fuese ese hombre... eso no lo dejaba en paz.

—Está bien, iré a checar. —se levantó con ella enganchada en la cintura y le dio un beso en la frente—. Volveré en un momento... —La besó en los labios y la acomodó sobre la almohada, caminó hacia la salida y cerró la puerta detrás de él.

—Lo siento joven amo... —se disculpó Baby-5, muy avergonzada al pensar que quizá le había interrumpido algún momento especial a Doflamingo.

—No te preocupes. —le puso la mano en la cabeza y con la otra aceptó el Den Den Mushi que ella le daba. Se alejó con rumbo a su oficina, donde atendería la llamada en total privacidad—. Soy yo... —Contestó la línea que había estado en espera.

Entretanto... (Tn) estaba en la habitación con la mirada perdida en el techo. Se sentía triste e impotente, ¿pero qué podía hacer? No existía nada que ella pudiese hacer para cambiar su destino, excepto un milagro ... sí, esa idea la hizo sonreír, el mero pensamiento de que eso sucediera le daba un toque de felicidad a su triste momento. Se recostó de lado y cerró sus ojos, «Dicen que los sueños... son los deseos del corazón», pensó queriendo mantener fresca ese pensamiento que le daba ilusión, para quizá poder soñar con ello.

Para cuando Doflamingo regresó a la habitación (Tn) de había quedado dormida, por lo que la observó por unos instantes.
Después de esa infructuosa llamada, lo estaba abandonando toda esperanza de poder salvarla, sin embargo se negaba a darse por vencido, no... no la perdería por nada del mundo, eso se lo había prometido.
Con sumo cuidado se acostó en la cama y la colocó sobre su pecho, así como era la costumbre de dormir junto a ella, al menos de esa manera sentía que la cuidaba.