ma douce prostituée

Capitulo 47

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POV. LENA

Los días siguientes a la noticia fueron algunos de los mejores de mi vida. La expectativa de estar cerca de personas que yo sabía que me amaban era algo maravilloso, y no era raro perder el enfoque en el trabajo pensando en el próximo encuentro con Eliza y Jeremiah, llevando a su hija junto a mí. Y entonces el único aspecto por el cual creía que no les agradaba completamente -mantener a Kara lejos- no existiría más.

El día de mi primer pago llegó. Sentía miedo, literalmente, de no poder manejar tantas buenas noticias al mismo tiempo y simplemente enloquecer. Y entonces me convencí de que me ponía más extraña cada día.

-¿Amor?

-¿Sí?

-Tengo un cheque en mi cartera.

Seguí mirándola de manera dulce, sin decir nada.

-¿Cómo fue a parar allí? - Kara insistió.

-Lo puse allí.

Me miró de forma inquisidora.

-¿Qué pasó? - Pregunté inocentemente.

-¿Qué esperas que haga con el?

-Ahm... ¿Depositarlo en tu cuenta, tal vez?

Kara hizo una cara de "entendí" e ignorando por completo mis explicaciones me entregó el cheque.

-¡Eh! ¡Es tuyo!

-No. - Ella dijo. - Es tuyo. Trabajaste por el.

-¡Pero dijiste que podía hacer lo que quisiera con el dinero! ¡Y quiero dártelo!

-¡Eso no tiene sentido! ¿Por qué me estás dando tu salario?

-Porque es sólo un poco de todo lo que gastas...

-Len, no empieces.

Kara habló de una manera seria, y por algún motivo me debilitó.

-¡No, no llores! ¡Por favor!

No sabía si ella estaba desesperada, pero cualquiera que fuera el caso, ya era tarde.

Las lágrimas empezaron a bajar sin que yo pudiera detenerlas.

-Ok, me quedo con el cheque. Pero por favor, no llores.

Y mis días pasaron a ser así. Siempre que cosas de ese tipo ocurrían, me sentía una completa idiota. Mi vida era maravillosa, entonces ¿por qué no paraba de llorar y enojarme como una depresiva?

-Amor, tal vez deberías ir a algún psicólogo... ¿Quieres que te haga una cita? - Un día Kara me dijo, y entonces peleé con ella, porque, además de llamarme loca, creía que era incompetente.

Sam pasaba a comer casi todos los días conmigo. Sabía que era por petición de Kara.

-Kara me dijo que estás molesta con ella. - Ella dijo, mientras comía el postre.