Capitulo 63

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...63...

POV. LENA

Llegué a la casa de Eliza y Jeremiah en el auto que Maggie conducía. La ceremonia sería en el jardín trasero, por lo que no había peligro de ser vista por alguien ya que todos estaban en sus lugares.

Caminé hacia un lado de la casa, mirando el suelo, los latidos de mi corazón parecían aumentar a cada paso que daba. Alex caminaba a mi lado, tan hermosa vistiendo un vestido largo y rojo que, por un momento, mi brillo de novia se debilitó. Pero no me importaba.

-Pero vean que hermosa novia. - Oí a alguien decir, y al mirar hacia arriba, vi a Clark en un traje elegante, mirándome con sus ojos brillantes, sonriendo de oreja a oreja.

-Hola... - Dije, y mi voz falló. Tal vez no había empleado la fuerza suficiente para emitir algún sonido.

Alex y Maggie simplemente desaparecieron, y cuando me di cuenta estaba sola con Clark.

-Bella dama, ¿acepta mi compañía hacia el altar? - Preguntó caballeroso, extendiendo su brazo y guiñando divertido.

-¿Vas a acompañarme? - Conseguí pronunciar.

-Sólo si tú quieres.

Entrelacé mi brazo con el suyo y suspiré. De repente, una canción comenzó a tocar, no era la marcha nupcial. Era algo más suave. Era un sonido maravilloso. Mi corazón comenzó a latir como loco.

-Clark... No me dejes caer.

-No te preocupes cuñada. Te puedo sostener con dos dedos. - Él habló, riéndose y mirando hacia adelante. - Por cierto, estas maravillosa.

No pude responder, ya que mi garganta parecía apretar más a cada segundo que pasaba. Cuando comenzó a caminar, hice todo lo que podía hacer en este momento: Lo seguí, al camino que me estaba esperando.

Conforme Clark me iba guiando, las cosas iban vagamente entrando en percepción pero no mucho. No estaba realmente mirando a mi alrededor, de todo lo que tenía noción eran de algunas mesas apartadas de nosotros, filas de bancas blancas y largas que se acercaban mientras caminábamos y de todas las personas, probablemente mirándome. Al frente de aquellos bancos y de todas las personas, en el centro, de pie como un sueño perfecto y hermoso, Kara nos miraba vistiendo un vestido blanco maravilloso, parecía una princesa, mi princesa. Ella derrochaba clase y belleza.

Apreté el brazo de Clark, respirando con un poco de dificultad. Él me miró discretamente.

-¿Estas bien? - Clark habló.

Asentí, incapaz de hablar. Tal vez lo que me estaba dejando en este estado fuera la expectativa, la anticipación, quería llegar pronto al lado de Kara y oír el "puedes besar a la novia." Tal vez era mi miedo de que algo malo, o, quizás, mi miedo de despertar con una sonrisa idiota en mi cara y dar de cara con las paredes sucias de mi apartamento, volviendo a la realidad de que nada de esto podía ser real.

Cerré mis ojos y seguí caminando, hablando en mi mente.

Que no despierte ahora... No ahora... No aún.

Sentí a Clark detenerse y mi corazón dio un salto enorme. Cuando conseguí reunir el coraje para abrir mis ojos, lo hice y vi a Kara delante de mí, con una gran sonrisa, tan hermosa como sólo ella sabía sonreír, su rubio cabello estaba suelto, con una pequeña camelia en el lado izquierdo de su cabeza, mirándome con un brillo especial en sus maravillosos ojos azules.

ma douce prostituéeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora