DESTINADA A TI©

Capitulo 79.

Mire a Amy sorprendida por el lugar donde estábamos, me había traído a un restaurante que es bastante lujoso en Londres, estábamos por entrar pero jale un poco su mano para que volteara a verme, ella me miró muy confundida y respire hondamente antes de hablar.

— Este restaurante es muy caro Amy, no traje dinero para pagar deje todo mi dinero en la casa, debemos volver. — Espete mirándola apenada.

— No seas tonta Kayla, si te estoy invitando es porque yo soy la que voy a pagar la cena. — Me miro con cara de pocos amigos.

— Bueno, solo por esta vez aceptó ya pero la próxima invito yo. — Asentí sonriendo mientras ella solo me miraba.

Amy solo tomo mi mano nuevamente y entramos al restaurante, pedimos una mesa y por suerte ella ya tenía todo resuelto ya que había pedido una reserva, nos dieron una mesa en el segundo piso, la única que quedaba libre era al lado de la ventana en donde se veía la calle y uno u otro edificios cerca.

— Que vista tan hermosa. — Comente sentándome.

— ¿Sabes porque te invite a cenar? — Cuestiono ella mirándome con una sonrisa.

— No lo sé. — Negué con la cabeza.

— Porque has sido una excelente amiga conmigo, desde que nos conocemos siempre has estado para mi Kayla y esta es mi manera de agradecerte todo. — Comentó mirándome atenta.

— Amy, no era necesario. — Sonreí agradecida. — Sabes que eres mi amiga y que siempre estaré para ti. — Sostuve su mano.

— Lo se, pero vamos a comer que muero de hambre. — Sonrió asintiendo.

— Está bien. — Asentí riendo. 

Un chico se acercó a nosotras y tomó nuestro pedido, Amy no paraba de coquetear con el, la mire un poco curiosa y cuando el chico se fue dejándonos totalmente solas, decidí hablar con ella sobre sus coqueteos con el mesero.

— Que coqueta eres. — Bromeé sonriendo.

— Es muy sexy, últimamente ando conociendo mucho chicos guapos en Londres. — Comentó con una sonrisa pícara en su rostro. — Estoy pensando en quedarme un tiempo aqui. — Me miró tomando un poco de agua.

— No me digas que piensas quedarte a vivir aqui. — La mire sorprendida.

— También quería comentarte algo. — Asintió acomodándose en su silla. — Tu suegro me ofreció un empleo en su despacho, sabes que no tengo trabajo y necesito dinero para poder comprar mi casa y bueno otras cosas que necesito. — Suspiró hondamente.

— Pero yo podría darte un empleo en la empresa. — Respondí seria.

— Lo sé Kay, pero quiero venirme a vivir a Londres. — Me miró sonriendo.

— Esta bien, si es tu decisión la respeto. — Asentí. — Pero quede claro que si quieres irte a vivir a Boston de nuevo, tienes las puerta de mi casa y mi empresa abiertas. — Tome sus manos con un poco de nostalgia.

— Lo tendré en cuenta y prometo que iré a Boston a visitarte cuando pueda. — Asintió con algo de nostalgia.

— Eso espero, ojala cumplas tu palabra de ir a verme. — Sonreí asintiendo.

Tras una cena de amigas bastante cómoda, volvimos a la mansión, admito que la noticia de que Amy se quedaría viviendo en Londres me sorprendió pero me daba gusto que tuviera un empleo seguro en las oficinas de Paul, entendía que quería cambiar de aires y la entendía, aunque sabía que ella estará bien y cumplirá sus sueños.