Doble Decisión. ¤ CNCO ¤

cincuenta y seis

—¡Ya hablamos de esto! ¡Vete! —dijo Aley alejándolo aunque en verdad quería que se quedara un poco más. Sostuvo mejor la sabana que cubría su cuerpo.

—Pero Aley...

—Cuando regreses seguiré aquí, ¿De acuerdo? No me iré. Voy a... a... no se, ver televisión y te esperaré.

—Bien.

—Vete.

Christopher se acercó a besarlo de nuevo y sin pensarlo le respondió dejando que quitara la sábana de su cuerpo. Las manos de Christopher fueron de nuevo a su sus piernas y reacciono.

—Adiós, bebé.

—Adiós. —contesto mordiendo su labio. —Te amo.

—Y yo a ti, bebé.

Se puso de pie y se alejó sin ganas de hacerlo dejándolo hecho un desastre sobre la cama.

. . .

—Se que te dije que cuando vinieras estaría libre para ti pero esta semana no me dieron permiso para no ir a trabajar...

Christopher asintio.

—¿Por que estas tan tranquilo?

—Por que voy a ir contigo.

—¿Que?

—Si, solo serán unas horas, ¿Cierto?

—Siempre te sales con la tuya.

Y así fue, Christopher estuvo 4 horas seguidas sentado frente Aley pagando tragos para que no lo echaran del lugar.

—¿Estas aquí solo? —escucho a una chica a su lado.

Christopher la mira un poco antes de ir a los ojos de Aley.

—Si. —contesto Aley con la confusión de Christopher.

—No.

—Oh, bueno, ¿Te gustaria...

—No, disculpa pero soy novio de este chico por muy extraño que parezca. —sonrio apenado. —No te preocupes, yo pago tu trago.

—¿Gracias...?

Ella se alejó y cuando fue lo suficiente Christopher se puso de pie y jalo el uniforme de Aley para besarlo rapido.

—¿Que fue eso?

—Tu y yo en este tipo de lugares no podemos...

—Si podemos. —contesto Christopher.

Aley había entendido eso como que su relación iba a tomar un paso bastante grande.