The Viner Girl || Magcon

XXV

CAMERON

Llevaba todo el día aturdido, desconcertado. El comportamiento de Nash era extraño, más que eso. Hoy se ha basado en "Ca$h", aunque posiblemente haya sido el día más plástico de mi vida. Nash a pretendido imitar nuestros antiguos momentos, lo de verdad. Pero sigo conociéndolo más que nadie, y sé perfectamente que todo ha sido una completa mentira. Todavía desconozco los fines de todo esto, pero me figuro que no debe ser nada bueno. Posiblemente quiera remontar nuestro acuerdo, o cancelar nuestra apuesta. Sigo sin saberlo.

Acababa de volver a la habitación. No había visto Arianna desde esta mañana, y sinceramente, lo agradecía. No podría haber soportado todas sus preguntas acorralándome. No tenía ni la menor idea de como contestarlas, todas las escudas que se me ocurrían eran una mierda. Y tendría que estar preparado, en cualquier momento le podría dar por acribillarme cual metralleta a preguntas. Me estaba haciendo un enorme cagado mental.

-Cam.-Shawn pasó su mano por delante de mi cara.-Tío, ¿Qué te pasa?

-Nash.-Es lo único que contesto sin conseguir quitar el aturdimiento de mi ser.

-Te entiendo.-Lo oigo decir, aunque no le miro.-Ese tío lleva comportándose raro todos estos días, ¿Qué demonios le pasa?-Me obligué a mirarle sorprendido.

-Tú...-Lo señalo.-¿Qué mierda te pasa a ti también?-Pregunto -aunque no lo parezca- suavemente.-Empecemos con que tú nunca hablas "groseramente". Después está que tú nunca te quejas de nadie, y mucho menos de Nash. ¿Qué te pasa? ¿Estas enfadado con el mundo.-Esto lo digo con rapidez y algo más de brusquedad.

-Tío, ¿Qué...-Le corto antes de que termine.

-Venga ya, Shawn.-Me quejo entrecerrando los ojos.-Te conozco tan bien como tú me conoces a mí. Y se perfectamente que algo te pasa.-Lo vuelvo a señalar y él aparta la mirada, indicando que lo he pillado de lleno. Coge aire y dice:

-Vale, sí, tú ganas.-Masculla cruzándose de brazos. Sonrío victorioso y hago que prosiga.-Esto no se lo puedes decir a nadie.-Asiento cambian de estado de animo a uno serio.-¿Entendido? Absolutamente a nadie, y mucho menos a Arianna...

-¿Porque a Arian...

-Porque no.-Me corta duramente y se acerca.

Mi cara pasa por varias expresiones faciales; primero sorprendido, después feliz, luego confundido, enfadado y por último triste. No creo que nos vaya a favorecer nada esto. Me dan ganas de llorar. No, no quiero que esto vuelva a pasar... Abrazo a Shawn, que a sido mi hermano durante todo este tiempo.

-Recuerda no contarlo.-Dice con una sonrisa triste al levantarse e irse, dejándome completamente solo en la habitación.

Me tumbo en la cama, pero justo antes de que Shawn atraviese la puerta le digo:

-¿Cuando será?-Silencio de su parte.

-En una semana.-Entonces se oye la puerta al cerrarse.

Ahora es cuando empiezan mis problemas.

(Una semana después...)

Arianna estaba a mi lado, asomada por una de las esquinas del escenario. Después de hacer nuestro M&G en Tampa, volamos a Nueva Orleans. Son las 7:47, y en diez minutos tenemos que salir ahí afuera hacer nuestro trabajo.
No puedo mentir en que mi relación con Arianna estos últimos días a sido algo "tensa". Me llegó a contar lo que le había revelado Nash sobre Ashley, y discutimos el tema. Los dos hemos estado algo estresados. Yo sobre todo; entre el tema de Shawn y las preguntas acusadoras de Arianna, mi cabeza se a convertido en un maldito infierno.
Esta noche ella se veía adorable. Me gustaba molestarla por su absurda estatura, o por lo infantil que llegaba a ser. Arianna conseguía sacarme varias sonrisas, y eso me encantaba.
Pero por otra parte, sentía un nudo en el estomago cada vez que veía su cara, después de que Shawn la evitara. Esto no iba a traer beneficios para nadie, y cuanto más se ocultara sería peor. Sería aún peor.
Sentía la tristeza y la impotencia caída sobre mí, como una gran pared de hierro. Debería sentirme bien, feliz, orgulloso por mi amigo. Pero no lo sentía así. Me quería dar cabezazos contra la pared.