The Viner Girl || Magcon

I

Arianna

La chica de recepción me tendió una tarjeta blanca con el logo del hotel en el que me encontraba. Era precioso y muy moderno. Las paredes eran blancas y algunas zonas eran como de piedras negras como el azabache. Suelos de mármol negro adornaban el lugar dándole un aire elegante, y de estos se alzaban algunas columnas que llegaban hasta el techo, que era negro, pero con pequeñas lucecitas que simulaban las estrellas en el espacio. Los muebles eran en cuero y madera, todo blanco y negro. Volví a mirar a la recepcionista y le sonreí.

-Tome Srta. Packet, es la llave de su habitación.- La agarré y le volví ha sonreír.- Por cierto, no se sí se lo habrán dicho.- Dijo antes de que me dirigiese al ascensor.- Pero la habitación la tiene que compartir con otras cinco personas.

-Sí, ya me habían informado.- Le dije para luego dirigirme al ascensor y marcar la sexta planta.

Estaba algo nerviosa. Iba a conocer a los chicos de Magcon, y quiero causarles buena impresión, excepto a la escoria humana de Dallas. El ascensor paró y agarré mi maleta dispuesta a salir por la puerta, pero nada más poner un pié fuera me choqué con un chico que venía concentrado en su móvil. Los dos caímos al suelo del pasillo por culpa del impacto, cada uno al lado contrario que el otro.

-Ten más cuidado.- Dijo el chico de manera borde. Levanté la vista y me encontré con un chico moreno, con la piel bronceada rascándome los ojos. Era nada más ni nada menos que Cameron Dallas. Lo miré con odio, mucho odio. Él se quitó las manos de la cara y sonrió. Se paró y me extendió la mano.- Bueno, te perdono por que eres muy guapa.- Dijo ahora intentado ligar conmigo. Por Dios. Miré su mano con asco y me levanté por mi propio pié. Me miró con el ceño fruncido y yo sólo le fulminé con la mirada. Agarré mi maleta dispuesta a irme, pero al pasar por su lado me cogió de la muñeca.- Hey, ¿No me vas ha decir como te llamas?- El me seguía agarrando la muñeca y con mi otra mano le propiné una fuerte cachetada. Cameron me soltó de inmediato y se llevó la mano a la zona afectada. Me di la vuelta, ahora sin interrupciones. Lo sentí gruñir a mis espaldas y le pegó a la papelera metálica de al lado del ascensor. Segundos después se oyó la puerta del ascensor cerrarse.

Suspiré. Vaya manera de conocernos, pero él no se había dado cuenta que era yo. Por suerte.

Caminé hasta pararme en la habitación 513, mi habitación. Al otro lado se oía música, gritos y risas. Sonreí. Los chicos seguro que ya estaban liando una de las suyas. Metí la tarjeta en la ranura y la saqué. Me la guardé en el bolsillo trasero de mis jeans y abrí la puerta. Al abrir la puerta la música paró de inmediato, y la habitación se quedó en completo silencio. Los nueve chicos se encontraban mirándome detenidamente con la boca en forma de "o". Sonreí nerviosa.- Hola.- Murmuré. Todos se miraron entre sí y sonrieron.

-¡Arianna!- Gritaron para segundos después abalanzarse todos sobre mí en un abrazo grupal. Reí un poco.

-Sí, sí, soy yo, pero me estáis aplastando.- Dije divertida. Todos rieron y se separaron de mi persona para mirarme con una gran sonrisa. Frente a mí estaban Carter, los Jacks, Taylor, Matthew, Nash, Shawn, Hayes y Aaron. Les sonreí ampliamente y pegué un pequeño grito.- ¡Oh Dios mío! ¡Sois vosostros! ¡Magcon!- Dije para abalanzarme a los brazos de Carter, que era el más cercano. Todos rieron.

-Tu también eres de Magcon, tonta.- Dijo Carter y me respondió al abrazo. Reí yo también.- Eres nuestra ídola.- Lo miré confundida.- Si Arianna, eres genial y muy graciosa.

-Y guapa.- Dijo Taylor en un susurro a Aaron que asintió. Los miré y se dieron cuenta que los oí.- Es la verdad, Packet.- Dijo para acercarse a mí y robarme de los brazos de Carter.

-Yo también quiero.- Dijo Johnson poniendo cara de cachorrito abandonado. Me acerqué y lo abracé. Hoy voy ha dar más abrazos que en toda mi vida.

Fui abrazándolos uno por uno hasta llegar a Nash, al que apreté más fuerte que a los demás.

- Creo que ya sabemos quién es tu debilidad.- Dijo Shawn, a lo que me sonrojé un poco.- Cuando Cam te vea va intentar ligar contigo.- Comentó y todos rieron. Si supieran.

Y como alma que trajo al diablo, un Cameron con cara de pocos amigos entró a la habitación dando un portazo. No me había visto ya que miraba hacia el suelo.

-¿Qué pasó tío?- Preguntó Nashty algo preocupado.

-Pues que al bajar me choqué con una tía en el ascensor y...- Levantó la vista y su cara pasó de asombro a odio. Le devolví la mirada.- Tú, ¿Qué haces aquí?- Dijo hostil. Todos posaron su mirada en nosotros. Cameron me miró mejor y puso cara de desconcierto.- ¿Eres Arianna Packet?- Preguntó con una mueca. Asentí fríamente. Cameron bufó y se llevó las manos a la cara, me dio una última mirada de odio y salió por la puerta de la misma manera que entró.

La habitación se quedó en completo silencio y todos miraban a la puerta por la que segundos antes salió el idiota de Dallas. De momento todos posaron su mirada en mí.

- ¿Qué ha sido eso?- Preguntaron todos al unísono.