40: bad dream

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—POR FIN has aceptado tu verdadera naturaleza

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POR FIN has aceptado tu verdadera naturaleza.—la voz dulce habló haciendo  que Amethyst abriera los ojos.

—¿Esto?—Amethyst se vio en el suelo brilloso a si misma, estaba vestida como hada pelirroja del bosque con la corona y el vestido, el suelo era brilloso dorado, y frente a ella en un trono dorado estaba Lilith también pelirroja y un ojo azul, y otro ojo con el iris blanco, sin embargo tenia las facciones mas diferentes que Amethyst aunque sin duda era bellísima, traia un vestido blanco elegante y una corona retorcida dorada, mientras su cabello pelirrojo caia en cascada en sus hombros. Era la mujer mas hermosa que Amethyst habia visto.

—La parte que te une a mi.

—La parte que me une a ti, es la mas destructiva, y lo que hace que todos me quieran capurar, por cierto, gracias por ponerle un precio a mi cabeza, lindo toque maternal .—dijo con sarcasmo--. Eres como madre Gothel entrando al top 10 de peores madre tenemos a Lilith. La madre de Damian justo pisándote los talones.

—Damian Wayne, hijo de Batman, si, si, nieto del demonio Al Ghul, lo conozco —Lilith asintió jugando con una piedra de color azul entre sus dedos—. Tu amante.

—Bueno, amante es una palabra muy fuerte. Yo diría novio con el que no he tenido alguan relación de tipo sexual—Amerhyst alzo una ceja, la palabra amantes" lo único que le hacia pensar era en dos personas teniendo sexo a escondidas.

—No debes estar debajo de un hombre.

—No estoy debajo de nadie, y mucho menos de Damian, somos iguales, ¡no es mi culpa que te obligaran  a estar con un idiota!—Amethyst rodó los ojos algo enojada. Aunque entendía la historia de Lilith, Damian la trataba....como una reina  Damian con su raro lenguaje a la antigua, le preguntaba y hacía cosas como un caballero de hace mas de 100 años. Amethyst lo trataba de ayudar a mejorar su lenguaje.

—Todos los hombres son iguales, mi querida Lilith—su madre suspiró—. Todos los hombres mortales.

—Mmm..si te sirve Damian volvió a la vida asi que no es como cualquier mortal—Amethyts dijo con una sonrisa sarcástica.

—¡El es un hijo de Adan! Dira que te ama, pero cuando  se de cuenta de tu verdadero poder, de tu carácter...

—¡Pues yo tambien! ¡Te acostate con un mortal para tenerme!—la chica exclamó de vuelta sin poder creer la hipocresía de su madre.

Lilith no respondió.

–¿Cierto? Porque o sino seria tan fea como Azazel o Trigon que son demonios, pero yo soy parte huamna—un sabor amargo se deslizo por la garganta de Amethyst, la vio con duda—. ¿cierto?

Lilith rió y vio a Amethyst como si fuera una niña de cuatro años que preguntaba algo gracioso y tierno, la mujer se paro de su trono, yendo hacia ella elegantemente.

AMETHYST |damian wayne|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora