Amethyst Wilson ha sido criada con una sola mision; vengar la muerte de sus padres, asesinar a Batman con sus propias manos. Alimentando su odio hacia los superheroes, Amethyst vive con quien es como un padre para ella; Slade Wilson conocido como el...
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ABRIO EL LAVABO y dejo que el agua corriera por sus manos antes de salpicarse la cara pasándose las manos por el rostro, abrió los ojos y se vio en el espejo, su reflejo era el de ella cuando se trasformaba en esa hada para pelear, el cabello pelirrojo, la corona de plumas y cosas, que parecía ninfa, solo que sus ojos era uno de color dorado y el otro de color blanco. Quiso golpear el espejo, pero no era su casa, pestañeó con fuerza y se volvió normal el reflejo, pero estuvo muy segura que le sonrió.
Se quito algunas astillas del cabello y se deshizo de la alta coleta de caballo que Harper le había hecho, soltándose el largo cabello. Lo que había sido una maravillosa velada terminó siendo una de sus peores pesadillas. Se sintió culpable por el vestido.
—Tu eres Amethyst Wilson, eres la mejor mercenaria de 16 años que existe, eres la hija de la reina del infierno y del Terminator, tú trajiste de vuelta a tu novio de entre los muertos, peleaste contra un duque del infierno y tú...—sintió escalofríos—. Puedes pasar una noche con la aterradora familia de los mejores detectives que existe.
Amethyst era una asquerosa detective, odiaba resolver problemas, a veces lo único que quería era pegarle en el rostro al Acertijo. Ella era una excelente luchadora, adoraba luchar y pelear, dar patadas, dar vueltas en el aire, ser francotiradora y usar sus poderes. Una de las razones por las que le gustaba Damian era porque el era sumamente inteligente y compilado, estructurado y equilibrado...ella necesitaba eso en su vida.
Una vez salió del baño se perdió un poco en la enorme mansión sin embargo paso por un pasillo de retratos, retratos pintados a mano de la familia que vivía aquí. Fue hasta el ultimo y sonrió al ver la expresión seria y responsable de Damian en este, con la suave sonrisa de su padre Bruce Wayne en el centro, Dick a su derecha con su sonrisa alegre, Jason travieso y coqueto y Tim serio pero alegre. Habian varios, pero el que mas le gusto a Amethyst fue el de una pareja con un anciano a su lado, y entre ellos había un chico pálido pero muy sonriente que era muy parecido a Damian solo que ese era un niño de ojos azules. Ese fue el que le gustó a Amethyst porque era una familia funcional y feliz, una familia que lo tenía todo, sin problemas de demonios o vigilantes, o del guasón, solo una familia aburrida, ella nunca veía eso a menudo.
—Son los abuelos de el amo Damian—una voz explico al ver como Amethyst veía el retrato de la gente rica con su hijo, era el mayordomo, Alfred—. Son el señor y la señora Wayne.
—Damian me dijo sobre ellos...los asesinó un ladrón.
—¿Qué piensa de eso señorita Wilson?
Se sintió muy extraño que alguien la llamara señorita, Slade de seguro se habría reído, cuando Amethyst trataba de poner la excusa de que ella era una dama para no hacer algo como ocultar un cadáver. Su padre se reía y le decía que de señorita no tenía nada.
—Hay gente que por amor renuncia a cosas como fumar o beber, yo por amor deje de matar a escorias como las que asesinaron a los abuelos de Damian. Vivimos en un mundo asqueroso....lo siento señor Alfred, no tengo mucho poder de discurso como los hombres con los que vive, no soy tan inteligente o madura como los de allá. Soy una mierda de detective.
