♕︎𝑪𝒖𝒂𝒓𝒆𝒏𝒕𝒂 𝒚 𝒔𝒆𝒊𝒔♕︎

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Habían estado patrullando callados, Horacio ya no quería escuchar hablar a Mike sobre Volkov, así que decidió ya no decir nada.
Conway entro en radio y habló.

-Aqui el superintendente Conway, Volkov, Horacio y Greco a mi despacho- dicho ese el mismo salió de nuevo de la radio.

Los mencionados hicieron un 10-8 a Comisaria.
Horacio estaba feliz porqué ya no iba a seguir patrullando con el alumno, la situación ya se había tornado un tanto incómoda.

Al llegar a Comisaria, asignó al alumno con Brown y el se dirigió a donde le solicitaban. Llegó al despacho, tocó la puerta y se escuchó un "adelante" por parte del superintendente.

-Buenas superintendente, ¿Qué pasa?-

-Tenemos información de la mafia, pero necesito a los que faltan para poder elaborar el plan- Conway saco un cigarro de la cajetilla y lo encendió- ¿Has ido a ver a Gustabo?-

-Si, ayer lo fui a ver, estaba bailando, dijo que se sentía mejor- Horacio se sentó en unas de las sillas que tenía frente al escritorio del mayor.

-Bueno, igual no podrá participar en el operativo que se lleve acabo, no creo que esté del todo bien para ese día-

-Tampoco creo que esté bien para ese día, igual no sabemos cuándo falta-

-Esta cerca, tranquilo-

La puerta se abrió dejando ver a los dos Comisarios Volkov y Greco.

-Priviet-

-Buenas Conway-

-Buenas, siéntense-

Volkov dejo que Greco se sentara en la silla que estaba vacía, y el se puso detrás de la silla de Horacio, recargando sus manos en la misma.

-Bien, la mafia aún sigue aquí, a Nadando, el que creemos que es jefe de la misma,  se le vio el día de ayer por el norte, junto con algunos más- apagó el cigarro- Así que suponemos que aún están todos en Los Santos, hasta ahorita solo tenemos a Armando, tengo a alguien siguiéndolo para ver qué día da un paso en falso y damos con su sede-

-¿Armando?- Horacio estaba confundido

-Si, Armando y Nadando son la misma persona, así pones atención Horacio-

-¿Solo nos hablo para decir eso?-

-Tranquilo Greco, es obvio que no, necesito que hoy en la noche ustedes vayan a vigilar a los demás-

Greco volteo a ver a Volkov y Horacio volteo también a ver al ruso, los tres sabían de la pequeña cita que tenían y para ser sinceros ninguno de los tres ahí presentes quería que se corriera para otro día.

-A los que tenemos son a Emilio Escobilla, a Tonet y a Juanjo, tenemos que estar detrás de ellos, esperando a ver quién de los cuatro de equivoca y revela su nueve sede-

-Conway, ¿Tiene que ser hoy?-

-Si, ¿Por qué nena? ¿Tienes algo mejor que hacer que atrapar a una mafia que trafica con coca y armas?-

Horacio respondió primero.

-En verdad no creo que nadie tenga algo mejor que hacer, estaremos en la noche en dónde usted diga super, con permiso- Horacio se levantó de su siento y caminó hacia la puerta, saliendo así del despacho.

A Volkov de alguna manera le había dolido el hecho de que Horacio dijera que no tenía nada mejor que hacer, tal vez había olvidado la cita. ¿Horacio en verdad estaba interesado en el? ¿En verdad quería ir a una cita?

Por otro lado, Horacio también se había sentido mal de haber respondido así, quería asistir a esa cita, tenía muchas ganas de platicar sus sentimientos a Volkov,  pero era atrapar a la mafia que dejó en el hospital a su amigo o dejarlos y perder la oportunidad de cogerlos.

Greco vio como Volkov bajo la mirada, así que estiró su brazo y suavemente le acaricio el hombro al contrario.

Conway ni siquiera presto atención, estaba leyendo unos documentos que tenía en una carpeta negra.

-Nos vamos Conway, envíe la ubicación de dónde tendremos que estar en la noche-

El superintendente solo asintió y así los dos Comisarios salieron del despacho. 

Caminaron hacia los vestidores en dónde Volkov se sentó y dijo la mirada en sus zapatos, estaba callado. Greco decidió hablar.

-Mira, se puede hacer otro día, tal vez dijo eso porqué quiere coger a los que le hicieron esto a su amigo- se sentó a un lado del ruso- Venga Viktor, de seguro es eso, no pasa nada ya verás, en cuanto le digas sobre quedar otro día te aseguro que te dirá que si-

-Si, de seguro otro día dirá que si, primero está el trabajo-

Volkov se levantó de si asiento y salió de los vestidores con dirección a su patrulla.

ᴠᴏʟᴋᴀᴄɪᴏDonde viven las historias. Descúbrelo ahora