Terminaron el procesado de los atracadores, no sin antes meterles uno que otro porrazo a los dos, por faltarles el respeto.
-Ahí te quedas, payaso, eso eres - hablaba Horacio
-Bien Horacio, vamos a patrullar, rápido.- Volkov esperaba que alguien entrara de servicio para ordenar que hiciera binomio con el crestas.
A pesar de nunca haberlo expresado, el menor no le caía del todo bien al comisario.
Volkov era como una nube gris y Horacio era como un arcoíris, lleno de color, siempre sonriendo, un tanto tímido para algunas cosas y no tanto para otras. Eran totalmente opuestos, y eso hacía que no le cayera tan bien.
-Usted se encarga de la radio y yo conduzco.- hablo Volkov. Los dos estaban en el patrulla, listos para empezar con el 10-33 habitual.
-10-4 comisario, actualmente están de servicio James, Leónidas, el superintendente, usted y yo.- Horacio estaba nervioso, se le notaba y sus acciones para tratar de ocultarlo eran casi nulas.
-10-4, no se porque Conway no está en radio, pero mande a Leónidas a Z-10 junto con James, que hagan 10-33 cerca del mecánico.-
Volkov encendió el patrulla y empezaron con el respectivo 10-33.
-Bien, aquí Conway, necesito una patrulla en mi 10-20, ¡cagando ostias!.- se escuchó al super por la radio.
-Comisario, mando a Z-10?.- pregunto Horacio.
-10-5, acudimos nosotros, indíqueme el 10-20 en el GPS.-
-H50, 10-97 super.-
Horacio marco el 10-20 de Conway en el GPS y se dirigieron para su ubicación lo más rápido posible. Al llegar a esta se encontraba el super junto con un chaval joven cerca de una moto, la cual estaba tirada en el suelo.
-Pero que coño.-
-Calla Volkov, mete a este en el patrulla, anda.-
-10-4.-
-Horacio, ¿patrullando con tu novio?.- pregunto Conway una vez Volkov estaba un poco lejos.
-Abuelo, aún no es mi novio, ojalá.- Horacio no estaba sorprendido de la pregunta del super, el ya sabía más o menos qué pasaba con el comisario y el.
Volkov ya había metido al sujeto al patrulla.
-Ya está, ¿de que se le acusa?.- preguntó el ruso.
-Faltas de respeto a un agente, mételo 20 meses a ver si se le quita, nos vemos luego nenas.- Volkov solo había parpadeado unos segundos y el super ya estaba a unos menos de el en la moto.
-Pero qué cabrón.- expresó Horacio.
-Te acostumbras, al patrulla, léale los derechos.- Volkov no estaba para lidiar con el de atrás, solo se iba a limitar a conducir, como la mayoría de veces.
Iban por la mitad del camino para llegar a comisaría, y el detenido no se callaba, al principio se había mantenido callado, pero después había estado hablándole a Horacio para que le hiciera caso.
-Hey, tu, crestas, ¿Cómo te llamas?.- hablo el de la parte trasera del vehículo.
-Es la quinta vez que preguntas, ya te lo he dicho, me llamo Horacio.-
-Es que me gusta mucho tu voz, si me tú me atraparás siempre me hago mil licorerías.- el de atrás tenía una sonrisa gigante, intentaba algo con Horacio, pues que desde que llegó a la ubicación de Conway de le había hecho un tipo muy guapo.
Volkov solo aceleró para llegar lo más pronto posible, el tipo era un pesado y eso le molestaba, aparte de que no podía callarse un momento para estar en paz.
-Venga, cállate ya de una vez, ya casi llegamos.- había hablado antes de que Horacio pudiera decir algo.
-¿Pero qué pasa? ¿Son novios?.- el detenido estaba un poco sorprendido por la reacción que había tenido Volkov después de estar todo el tiempo callado.
-No, no somos nada, y si lo fuéramos a ti no te importaría, ya cállate de una puta vez.- Volkov no estaba celoso, solo estaba cansado de escuchar cómo el detenido intentaba ligar con un agente.
-Venga, pues si no son nada no te enojes coño, venga me callo, pero Horacio que sepas que eres muy guapo, te daría un beso pero está este vidrio que nos divide, ah, y tú novio amargado.- el sujeto se había resignado a no hablar después de lo que ya había dicho.
-------- ≪ °✾° ≫ --------
Horacio solo se encontraba en silencio tratando de asimilar el comportamiento de Volkov.
¿Se había comportado así solo porque el sujeto era molesto? O por qué en realidad se había puesto celoso?
En la cabeza de Horacio estaban esas preguntas y la frase que había dicho Volkov.
"Y si lo fuéramos a ti no te importaría."
El menor ya no sabía qué pensar al respecto, pero si se tenía que quedar con algo, sería la suposición de que el ruso se había puesto celoso.
Al llegar a la comisaría, Volkov se apresuró a bajar al sujeto y llevarlo directamente a la sala de procesado.
Al entregarle la multa lo esposo nuevamente, le escoltó hasta las rejas, le quitó sus pertenencias y lo metió en una celda.
-Venga, veinticinco meses, por listo.-
-Pero Volkov, el super indico que eran veinte.- habló Horacio, el cual no sabía por qué iban a encerrar al sujeto cinco meses de más.
-No importa guapo, déjalo, son solo cinco meses más, con tal de verte aquí todos los días me conformo.- hablo el sujeto.
-Hasta los cojones estoy de ti, venga Horacio, tire al patrulla.-
El 10-33 después de lo ocurrido fue un tanto incómodo para Horacio, no sabía el porqué del comportamiento del comisario, pero tenía que averiguarlo.
En cambio Volkov solo estaba cansado de tener que encerrar siempre a los mismos inútiles.
Al terminar de patrullar hicieron un 10-8 para su posterior 10-10, cada uno yéndose para su casa, Horacio con dudas y Volkov hasta los cojones del trabajo.
