Una vez en comisaría Viktor fue directamente a la sala de interrogatorios, pues sabía que desde hace rato el superintendente estaba esperándolo, no se molestó siquiera en tomar las armas reglamentarias.
-Priviet- dijo pasando a la sala, dónde se encontraba un tipo moreno, con un tatuaje en la cara de una calavera, esposado y sentado frente al superintendente.
-Coño, hasta que llegas, ya era hora nena, una puta hora, ¿Qué cojones hacías?- a este punto Conway había quitado la vista de el moreno esposado para ponerla en comisario que tenía un semblante serio.
-Ni importa, ya estoy aquí, vamos a empezar.- una vez dicho esto Viktor solo se poso a un lado del superintendente para empezar a hacer las preguntas.
-------- ≪ °✾° ≫ --------
Llevaban al rededor de dos horas en ese interrogatorio, habían dejado a un subinspector a cargo de la malla, y habían indicado que no estarían disponibles hasta que ellos indicaran lo contrario. Conway ya había sacado la porra y había golpeado al chico para hacerlo hablar, el trabajo de Viktor a ese punto solo había sido el poner la cámaras en bucle y gritarle de vez en cuando al moreno para que le contestara al super.
-Que hables coño.- decía el super soltándole un porrazo al moreno.
-Que mas quieres que te diga coño, para de una puta vez.- el chico ya estaba con la cara hinchada de tantos golpes, pero simplemente no quería cooperar.
-Venga coño, llevamos dos horas en esta puta sala, habla de una vez, ahórrate esto porque yo ya me aburrí- decía Viktor estableciendo contacto visual con el moreno.
-Esta bien, hay un hombre que va en una moto, no se bien el modelo, le llaman Blackie, el me da toda la droga, yo solo la vendo. Si se enteran que estoy aquí y que hable van a matar a mi familia, mi madre y hermanos no tienen la culpa, por favor,- a este punto el chico ya estaba decidido a colaborar, ya no aguantaba mas golpes por parte de Conway, y solo quería ayuda, porqué en verdad el no quería estar en ese mundo.
-Venga, se acabó, vas a pasar los meses que se estipulan por la droga que estuviste vendiendo y por huida de la justicia, a tu familia la van a custodiar unos agentes que en este momento voy a asignar, venga a la celda.- dicho esto Viktor ayudo al joven a ir a la celda, lo metió ahí y cerró la celda con el candado.
-Joder Volkov, hoy estás católico eh, quien como tu- Conway se separó de el para ir a poner las cámaras normales otra vez.
Viktor se separó y fue al primer piso de la comisaría. Prendió la radio, pido que z30 hiciera un diez ocho y asignó que hicieran diez-treinta y tres en la zona que el chico le había dicho que residía su familia.
-Volkov, ven a mi despacho- hablo Conway por radio.
-10-97- informo y se dirigió a su despacho.
Al entrar se dio cuenta de que no estaba solo, había dos civiles con el y un comisario, Ivanov.
-Priviet señores- dijo una vez paso al despacho.
-Venga nenas, saluden- Conway solo ladeo una sonrisa y se metió a la boca el cigarro que hace unos segundos se había sacados para poder hablar.
-Buenas comisario- hablo un chico rubio, pegándole un codazo a su amigo, en cuanto Viktor posó la vista sobre el otro chico lo reconoció casi de inmediato, era el chico que le había guiñado el ojo y el cual se había encontrado en el parking de su edificio.
-Con que mi superior y mi vecino, ostia. Buenas, comisario- dijo el de cresta, el cual también le había reconocido, dado que desde que lo vio en el elevador se le había hecho muy apuesto.Viktor se limito a decir algo al respecto con lo de ser vecinos, y solo presto atención a lo que Conway iba a decir.
-Bueno nenas, luego se conocen, tendrán tiempo. Volkov, Ivanov, les presento a Gustabo y a Horacio, fueron trasladados el día de ayer de la comisaría de los ángeles, son subinspectores y seguirán manteniendo su rango aquí ya que los necesito para algunos operativos que tendremos en unos meses.- dijo para sentarse en su gran silla y prender otro cigarro.
-En efecto, estamos aquí para ayudar en lo que sea posible- hablo Gustabo.
-Ah, Volkov, no te olvides de poner a Greco al tanto con esto, luego se pone de nena y dice que nunca le decimos las cosas. Venga, a trabajar.- dicho estoy todos se pararon y salieron de el despacho.