Aprendiendo a Vivir

Capítulo 59

Pantano Tinglit - Paul, 02:30 p.m.

-- Te he extrañado mucho hijo -- mi madre se me acercó -- la última vez que te vi fueron solo unos minutos en aquel árbol, ¿cómo has estado desde ese entonces?.

-- Todo bien, ¿qué haces tú aquí?.

-- este es el pantano de la tribu Tinglit, aquí las almas de las personas más importantes que uno ha perdido se muestran para venir a verlos.

-- ¿esto tiene que ver con la prueba?.

-- camina conmigo -- extendió su mano, no dudé en sujetarla, la neblina se despejó para trasladarnos a un campo verde -- por aquí es muy pacífico -- me guió hasta un árbol en donde nos sentamos -- ¿qué es lo que sientes tú?.

-- tranquilidad -- mencioné al ver que no había ningún ruido -- ¿así vives en el otro mundo?

-- sí -- mostró una sonrisa cálida -- el paraíso es el lugar más hermoso y maravilloso que ha existido.

-- entonces no extrañas haber seguido viva.

-- por supuesto que sí, extraño la vida que tenía, por sobre todo te extraño a ti y a tu hermano.

-- lamentablemente pertenecemos a mundos distintos.

-- lo sé. Me fui muy pronto, no pude estar cuando más me necesitabas... desde arriba pude ver todo lo que pasaba contigo... no quiero alejarme de ti otra vez, es por eso que te pido que te quedes aquí, conmigo.

-- ¿quedarme contigo?, yo no podría, yo no estoy muerto.

-- eso también lo sé. Este pantano puede hacer que tú y yo permanezcamos juntos otra vez, no necesitas estar muerto -- acarició mi rostro como hace tantos años -- no quiero volver sin ti, no quiero estar sola allá en el otro mundo pensando que no estaré con ustedes cuando más me necesiten... Por favor, quédate conmigo.

El querer volver a estar con mi madre siempre había sido lo que más quería, solo ella podía comprenderme, solo ella estaba a mi lado cuando más lo necesitaba... es con ella con quien quiero estar... solo quiero tener más tiempo con ella... solo quiero disfrutar de lo que hubiera sido sino se hubiera ido tan pronto.

-- Paul, aquí podemos tener una vida tranquila, podemos hacer que lo imposible se vuelva posible, que aquello que no fue, lo sea -- extendió su mano hacia un extremo, yo solo miré y de este un niño azabache de ojos negros apareció -- ¿sabes quién es? -- no respondí -- es tu hijo, el niño que no nació, el niño de quien tu te harías responsable pero no pudo ser posible.

-- ¿enserio es él?

-- por supuesto, es él. Quédate y haznos felices, como debio haber sido.

El niño se me acercó sin miedo, me dio un abrazo al cual yo solo reaccioné dando unas suaves palmadas en su cabeza. Miré hacia el frente y vi mi casa de Texas, mi hermano, mi cuñada, mi padre... todos estaban ahí, parecían felices... incluso ella, la que hubiera sido la madre de mi hijo...

<< hubiera...>> tan solo pensar en esa palabra... << hubiera... >> pero no fue... el tiempo puede llegar a curar muchas cosas... pero no puede cambiar lo que alguna vez ya sucedió...

-- lo que más quiero es poder estar a tu lado madre; pero no puedo, tú misma lo dijiste, "hubiera", pero no fue, no se cumplió. No se puede cambiar el pasado, y por más que quiera tener lo que me muestras y me dices, no puedo quedarme contigo viendo esto -- señalé la imagen que se proyectaba -- si me quedara contigo lo que estaría viendo sería una ilusión; esto es una falsedad, una mentira, no es real. Cumpliste tu ciclo en el mundo de los vivos hace mucho tiempo, pero yo aún no, debo irme, ese es mi lugar.