El ultimo cigarrillo de cada noche.

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Es que suele pasar que a veces me canso del "todo contra todos".
Voy navegando por mis pensamientos, en barcas que encallan en egoísmos incompetentes, en inocencias perdidas y en traiciones demasiado criticadas.
Y cual es el punto? Si errar es humano, errar es humano!
Siniestro. Muy siniestro...
No se puede ir contra las resacas, la intuición mortal, los engaños y el amor no encontrado.
Regreso de mi olvido... Es que a veces me olvido de lo peligroso que es estar vivo en un mundo tan desamparado.
Nicotina, fiel compañera de mis noches.
Y si... Bebía para huir.
No es lo mejor, ni lo que deseo, ni lo que pretendo. No!
Deja vu de lo que va a venir... O de lo que quizás pasó. Ese grito de mediocridad me aferró a ilusiones criminales que hacen recorrer un frío desalentador sobre mi espina dorsal.
Como un boomerang en las calles, en algún sueño me empapo de libertad.
Nunca me di cuenta que vivía muy de prisa, ojalá lo hubiera sabido antes!
Miradas latentes, llenas de envidia, celos fantasmagóricos y profetas ficticios de tiempos pasados.
En la oscuridad...
Siempre me pierdo en el mismo sendero, no creas que lo urgente es importante, rechaza el recelo y vuelve a la cordura, total, todos vamos a morir algún día.
No hay que forzar a la realidad, la normalidad no es segura.
Imaginar que puedes enjuiciar a los malditos recuerdos.
Quizás, hoy, el golpe no se estrelle en mis mejillas...
Pedir perdón, es demasiado en este instante etéreo, pero sobrelleva a la  congoja de insaciables tardes.
Caminaste, fallaste, respiras, vuelves a mirar, miras a tus pies... Probaste el amargo sabor del vacío absoluto que recorre el aire, cambiar el destino no es para siempre...
Un fragmento de hambre insaciable, una respuesta reflejada en esos ojos negros, ayudas que tardan mucho.
Palabras sin eco que intento descifrar.
Arden las manifestaciones de dolor, no sé quién soy o me desconozco... Quisiera encontrar el camino a casa!
Voy quemándome, puse mi cabeza en esta guillotina, vibran mis palacios y pongo la basura bajo la alfombra... Consuelo espiritual?
Creo que seguiré tratando de inventar una nueva manera de seguir... Sin sentirme tan mal.
Voy a tratar de replegar a mis labios, soy claramente invisible... Tengo unos dientes solidarios apretando fuerte en mi yugular! Y no parece tan fatal...
Siempre supe que no merecía cargar con tantas cruces.
Alma sin salvación, abnegado de portar miserias, ya su corazón no se siente cotizado.
Necesito saciar mi sed, atrapado en mis venas trato de vivir sin temer, las cenizas en el aire se vuelven confusas... Marginación!
Es que ese rumor también adormece. Viajo sin equipaje por la marea, adicto a confusiones desesperadas, busco ese escape que me lleve al pasado para arreglar mis equivocaciones...
En todo retorno algo nuevo nace. Bueno, malo... Eso no importa ya.
No queda nada por incendiar.
Brindo en la nada, busque asilo en corazones y camas equivocadas, hasta perder la noción...

Y en el último cigarrillo de cada noche, le pide a Dios que siempre proteja a su amada...

Amor, desamor y otras formas de morir (parte 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora