Noches vacías.

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Amar demasiado a alguien a veces se torna de doble filo. No elegimos de quien enamorarnos, y casi siempre no es la persona debida, pero la vida es así, nos sorprende en demasía.
Y, después de los primeros y últimos errores, buscas ese rostro en tu alrededor, en otra gente, en aquellos rincones donde supiste que se amaron y eran felices. En cada sitio donde se sintieron huir de la realidad en un cóctel de piel, caricias y besos...
Es que los seres humanos no sabemos valorar lo que tenemos cuando lo tenemos, no sabemos medir la intensidad de los sentimientos, y se tensa el fracaso y el dolor con la partida.
Perdón por no cuidarte, perdón por no haber coincidido contigo en otros días menos difíciles, perdón por todas las heridas, las deudas y más que nada, perdón por todos los momentos en los que no supe o no quise escucharte...
Gracias a ti pude mitigar tantos años de soledades.
Solo me quedan los recuerdos de lo que pudo ser y no fue...
Demasiadas noches vacías de alcohol y llanto desde que no estás.
Quizás muera marchito pero siempre recordaré que fuiste la dueña de todo mi ser.
Es que al observar tu rostro, no hay piel que no se erice ni pecho que no se contraiga...
Quizás no pude asimilar la idea de que tu destino estaba en otras latitudes... Y solo los cobardes pueden echar a otros brazos a su ser amado.
Verdad y profundidad, seres obsecuentes y lástima propia... Siento que me apuñalan en el corazón!
Aún sigo envolviendo arrepentimientos, nostalgias, interrogantes y maldiciones...
Hoy por hoy solo veo miradas, y no puedo interpretar lo que dicen... Y tú sabías muy bien que pensaba, cuando y como. Arde...
Te amaré por la eternidad y un día más... Tenlo por seguro.
Tengo que sacar del viejo cajón del tiempo la carta de resignación, llorarte por última vez y soltar toda nuestra historia... Pero te juro que no puedo!
Cierro mis ojos, abro mi alma y allí estás, más bella que de costumbre!
Así voy pasando los instantes, con calma y puñal, con sórdidos gritos y miedos futuristas, con tensiones y melancolías...
Perdóname por ser tan cobarde, con estas palabras simplemente quería que sepas que...
Amarte es reconocerte en mi silencio... Más presente que nunca!

Amor, desamor y otras formas de morir (parte 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora