Estigmas sobre estigmas.

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"No confíes demasiado en la gente, eso te hace vulnerable..."
Cuantas veces oí esta frase, acompañada de muchas otras, llenas de verdad y avaricia. Como si estuvieran talladas por un doble filo que se asemeja mucho a alguna que otra realidad sin mucho sentido, pero realidad al fin.
"No reniegues de tus miedos, debes asimilarlos, aprender de ellos y superarlos!"
Es que mutuamente se abren puertas finales, solo que el cansancio no te deja ver más allá de tus narices. Y no te culpo.
Quizás no soy la mejor versión de mi mismo, pero te prometo que trabajo todos los días en superarme... Es que de golpe la vida te muestra todos los momentos en que te equivocaste, y ahí desgarra el dolor... Te arrepientes y lloras, pero te sientes fuerte y crees que nadie podría tocarte. Y esa es una acción completamente equivoca.
Tenemos muchos estigmas sobre estigmas, pero el poder de autosuficiencia y autosuperación son uniformes. Brillan tus ojos a la espera de nuevos tiempos donde no todo sea trágico.
Nunca te diste cuenta, pero estuviste toda tu vida prisionero de un mismo sueño. Trunco, cabizbajo, quizás más normal para la ocasión...
Desazón, temor. Estereotipos que trastabillan y estrechan las manos con el destino. Es que nada y todo te defrauda a la vez!
Y no es algo que puedas manejar, sabes?
La ilusión va a toda velocidad como tu corazón agitado, y se aferran al último matiz de clemencia suburbana. No encuentras sentido en nada, pero te ves cada instante mas alejado de las llamas de la agonía.
Estigma de estigmas, sobrevalorados sobre la congoja absoluta y real!
Ya rompiste demasiadas reglas, aprende a volver a empezar, escucha a tu conciencia, hay igualdad aunque no lo creas.
Crónicas de evolución sin anomalías para contar.
Elige que tu vida vaya a tu compás, te prometo que no es tan difícil!
Toma las riendas, en tu mente hay democracia etérea, nueva era.
Verás que no eres tan descartable al fin y al cabo.
Es que sin recuerdos empiezas a morir muy lentamente, y puedes conseguir algo más que rasguños, susurros y una cabeza ciega de desconfianza... Déjate llevar por tus instintos, ve más allá.
Deja atrás todas esas frases incompletas, esa mirada triste, esas noches ahogado en alcohol, esas maldiciones echadas al aire.
Aprovecha en vida, no llores sobre el cadáver...
No cometas los mismos errores que yo cometí. Todas historias tienen un final, bueno o malo, pero final es final.
Y aún estás a tiempo de cambiarlo.

Amor, desamor y otras formas de morir (parte 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora