El príncipe Erick ||Joerick||

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Por la mañana justo en la entrada estaba esperando a que el coche de mis amigos apareciera.

Con el paso de los años continuamos hablando, pero vernos era más difícil pues cada tenía sus propios deberes; hoy, desde de casi dos años por fin lograremos reunirnos.

El claxon de un carro comenzó a sonar y pude percibir su auto; comencé a reír pues mi corazón se llenó de gozo; éramos tan unidos, nos divertíamos juntos, prometimos que nuestra amistad duraría para siempre y todo cambio después de que me case.

Rikki se estaciona a media entrada, Dayron ya está corriendo hacia mi y Rikki lo sigue de cerca.

- Erickin...

Me abraza fuertemente y después siento como otros brazos se nos unen.

- Alteza -se burla Rikki-

- Los extrañe

Después de estar abrazados por unos minutos nos soltamos.

- ¿Cómo estás Erick?

- Bien -sonreí- Dios, los extrañaba tanto -brinque de la emoción- ¿Ustedes qué tal?

- Dayron está estudiando una maestría

- Rikki tiene novio -alardea- se llama Abraham

- Eso es genial

- Lo es -agrega- es tan ardiente y lo hace tan bien

- Okay mucha información -Dayron tapa su boca- perdonalo Erick, es un sin vergüenza

- ¿Y Joel?

- Adentro, con Brian, pasemos

Me siguen hacia dentro.

- Debe de estar muy grande ya

- Joder -suelta Rikki- estoy en el palacio real -dice con la mano en el pecho- ¿Dónde está mi cámara?

- Debes divertirte aquí dentro

Si tan solo supieran la verdad.

- Lo intento

Trate de sonreír, sin embargo solo logré dibujar una mueca e hice mal, porque me conocen demasiado.

- ¿Qué está mal?

- Nada -me apresuré- ¿Quieren agua?

Camine hacia la cocina para que me siguieran.

- Erick...

Joel.

Dayron y Rikki se giran de inmediato.

- Alteza real

Dicen al mismo tiempo haciendo reverencia mostrando su respeto ante mi ahora esposo.

Solo les sonríe de vuelta.

- ¿Qué sucede?

Sin necesidad de hablar supe lo que quería; ya se tenía que ir.

Tome a Brian de sus brazos.

- ¿Lo pueden abrazar?

- Claro

Rikki es quién lo abraza.

- Con permiso

Camina hacia la salida y lo sigo de cerca.

Antes de que pudiera abrir la puerta puse mi mano sobre la manija.

- Te dije que vendrían -susurre-

- Por eso mismo me voy -también susurra-

- Pero son mis invitados, es irrespetuoso Joel