Brandon y yo llegamos a nuestro destino. Llegamos a un karaoke, al "J Karaoke para ser más exactos. No sabía porque me había traído aquí, si no mal recordaba a él no le gustaba cantar y pues a mi... A mi me encantaba cantar y siempre tenía mucho público admirando mi" maravillosa voz". Bueno, si a botellas de shampoo y jabones se les podía decir público pues ellos lo eran.
El lugar era bastante agradable, habían personas intentando entonar y otros que sólo iban a pasar un buen rato o a beber una copa.
Me encantaba el estilo del lugar, se veía que la música de los 80's reinaba en el lugar, a juzgar por el ambiente y porque ya iban como tres canciones de Cyndi Lauper que cantaban.
Toda la decoración me encantó, hasta que me tope con una imagen de... Michael Jackson. Era como una silueta en donde estaba parado de puntillas.
¿Destino o casualidad? No lo sé, el caso es que este hombre parecía seguirme.Brandon y yo tomamos asiento en nuestra mesa. Comenzamos a charlar mientras traían la carta.
— Espero que el lugar sea de tu agrado — me dijo mientras me guiñaba un ojo.
— Claro, es un bonito lugar. Aunque...
— ¿Aunque que?
— Es muy extraño que me hayas traído a un karaoke. Eres la última persona que se atrevería subirse a cantar en un escenario.
— Bueno, no porque vengas a un karaoke tienes que cantar a fuerzas ¿no crees? Además quise venir a un lugar diferente. Quien quita y tú te animas y te subes a dedicarme una canción — sonrió tomándome de la mano.
— ¿Yo? — reí — No y menos delante de tanta gente. Pero de igual manera me fascina el lugar, y quisiera que algún día tú me dedicará una canción.
— ¿Cómo crees? Tal vez si tuviera una voz como... Como la de Michael Jackson por ejemplo, tal vez así me animaría.
"Michael Jackson" me repite en mis adentros. ¿Por qué lo mencionaba a él? ¿Que no pudo compararse con otro artista? Él no era el único cantante del mundo.
En fin...— Su carta jóvenes — se acercó un mesero dejando las cartas.
— Mhh.. — Brandon miraba el menú de botanas y bebidas — Pediré un tarro de cerveza y una orden de nachos con carne por favor.
— ¿Y para la señorita? — se dirigió a mi el mesero.
— ¿Puede traerme una limonada por favor?
— ¿Nada más?
— Si.
— Enseguida traigo su orden — el mesero se marchó.
— ¿No prefieres algo más fuerte que una limonada? No se, tal vez ¿Una limonada con tequila?
— Amm no... Sabes que casi no tomo alcohol.
— Pero si te he visto tomar cocteles.
— Pero hoy no tengo ganas de probar ni una sola gota de alcohol. Una limonada está perfecta.
— Okey, de todas formas podemos brindar.
— Justamente —sonreí.
*****
En la habitación de las chicas.
Amber se daba sus últimos toques en el espejo, también saldría esa noche y quería verse bien.
Tory que salía de la ducha miró con el ceñir fruncido a Amber.— ¿Saldrás — preguntó Tory mirándola por el espejo del tocador.
— Si — viró para ver a Tory - no te invito porque saldré con un muchacho — dijo sonriendo con picardía y no creo que quieras hacer mal tercio ¿verdad?
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Un alma distinta
FanficUn alma distinta es mi primer novela en esta plataforma. Me siento muy orgullosa de poder presentarles mi trabajo por primera vez. La historia es hermosa. Hay temas ficticios y unos no tanto,espero que no se molesten si no es muy real en cuanto a la...