24 de diciembre.
Mi familia y yo disfrutábamos de nuestra cena navideña, mamá había cocinado un rico salmón ahumado, puré de papa y ponche de frutas. Por supuesto compró una botella de champagne para celebrar.
— Quiero agradecer que me hayan invitado a su cena señor y señora Harris — Amber pudo acompañarnos a la cena, como lo adivine, sus padres se fueron a una cena y la dejaron sola.
— No tienes nada que agradecer — respondió mi madre con una sonrisa — no sería justo que te la pasaras encerrada en tu casa.
— De todos modos, muchas gracias. Su cena está deliciosa.
— ¡Gracias!
— Me da gusto que también te vayas a quedar a dormir aquí — añadí, la verdad es que quise que se quedara aquí conmigo. No quería estuviese sola toda la noche.
— A mi también — dijo ella con entusiasmo.
— Bueno — papá se puso de pie y alzó su copa de champagne — quiero proponer un brindis, por mi familia, porque estamos juntos, y porque este año que vendrá, sea mucho mejor para todos — salud.
Nosotros hicimos lo mismo.
Después de ese lindo brindis, comenzamos a cenar. Mamá tenía un sazón riquísimo, todo lo que cocinaba le quedaba delicioso.
Acabada la cena, cada quien se fue a su habitación. Amber se quedaría conmigo en mi recámara, ella quería quedarse en la habitación de huéspedes, pero yo insistí que durmiera conmigo.
— Gracias por prestarme una de tus pijamas — musito una vez cobijada.
Yo aun me encontraba cepillando mi cabello en mi tocador.
— De nada, es un gusto tenerte aquí.
— No puedo creer que tú y tus padres sientan más compasión por mi que mis propios padres — dijo con algo de resentimiento.
— Amber, no digas eso — deje de hacer lo que estaba haciendo y me acerque a ella — estoy segura de que tus padres te aman, solo que...a veces se equivocan.
— No lo sé, nunca me lo han demostrado... Cuando yo era pequeña...falleció mi hermano menor.
— ¿Qué? — ¿cómo es que nunca nos había contado tal cosa? — ¿T-tenías un hermano?
— Si — susurro — jamás he hablado de esto con nadie, y es que es muy doloroso. Pero si, tuve un hermano, su nombre era Luke. Era menor que yo por tres años.
— ¿Cómo murió? Si no es...imprudente.
— No, descuida... Él y yo jugábamos como siempre en el jardín de nuestra casa, jugábamos en las ramas de un gran árbol que se encontraba allí. Él quiso alcanzarme, yo iba más arriba que él... — sollozo — Él...trepaba el árbol más a prisa para llegar a mi, pero una de las ramas donde pisó...se quebró y él...cayó hasta abajo, golpeándose así con una roca en su cabeza y jamás despertó.
— Por Dios — susurre cubriendo mis labios. Pobre Amber, no puedo imaginar lo que sintió en ese momento.
— Mis padres...me recriminaron, me dijeron que no lo había cuidado bien. Estuvieron destrozados — sus lágrimas comenzaban a bajar por sus mejillas — yo...era una niña Emily, una niña de nueve años que vio morir a su hermano. ¿Cómo podían culparme a mi? — entonces se quebró, dejó salir un ahogado llanto, no pude contenerme y la estreche contra mi.
— Amber...lamento tanto que eso te haya ocurrido — musitaba mientras acariciaba su cabello.
— Desde entonces mis padres son así conmigo — se alejo de mi y limpio sus lágrimas con agresividad — distantes, fríos. Pero me interesa cada vez menos que me quieran, con que me den dinero es suficiente — ahora su voz era diferente, con resentimiento y rencor.
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Un alma distinta
FanfictionUn alma distinta es mi primer novela en esta plataforma. Me siento muy orgullosa de poder presentarles mi trabajo por primera vez. La historia es hermosa. Hay temas ficticios y unos no tanto,espero que no se molesten si no es muy real en cuanto a la...