Cap 18

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Después de terminar las primeras clases me despedí de denki, el me dijo que me enviaría un mensaje al terminar las clases de hoy.

Es hora del almuerzo y me iba a encontrar con shinso. Estoy realmente nerviosa, Quizás es porque ha pasado un tiempo desde que había hablado con el también de nuestra separación.

En momentos así me gustaría tirarme a sus brazos y hablar con el sobre lo qué pasa con bakugo, contarle y el me dice que debería hacer.

Suspiré profundamente y entré a la cafetería, lo vi en una de las meses del centro con dos bandejas de comida, no pude evitar esbozar una sonrisa.

Tome fuertemente la correa de mi mochila y camine lo más segura hacia el sin importarme quién iba pasando cerca de mi.

Shinso alzó la mirada ,me vio seguido de eso alzó la mano, ese cosquilleo recorrió mi espalda. Apresure El Paso y al llegar choque con alguien.

La bandeja de comida que llevaba tal persona había caído al piso.

—carajo, fíjate por donde vas—

Apreté los ojos. Sabia de quién era esa voz. Creí que este día era bueno.

—Maldición— murmuré.

—Haru— me llamo Bakugo, mi mirada subió hasta donde estaba su suéter, era color blanco para mi mala suerte y había quedado empapado de la comida y la bebida.

—¿No te vas a disculpar?— me hablo el con un tono dulce y malicioso a la vez.

"No lo voy hacer idiota" eso tenía ganas de responder pero no iba a dejar que este imbecil arruinara mi día.

—Lo siento— dije y camine unos cuantos pasos alejándome de el.

—Haru— me llamo y me volteé, alce la cejas dándole a entender que era lo que quería.

—No piensas dejarme con este suéter asi de manchado por tu culpa— el enarco una ceja y alzó los hombros.

—Ya dije que lo sentía— dije y puse los ojos en blanco.

—Tu disculpa no es sincera.— hablaba el mientras se quito el suéter dejando su abdomen marcado a la vista.

Mi cara estaba roja de vergüenza y las personas en la cafetería no tardaron mucho a tomar fotos y gritar cosas. Estaba realmente apenada.

Mire hacia donde estaba sentado shinso y tenía la cara neutra, de por si ese chico es tan inexpresivo pero uno vez que lo conoces es realmente una ternura.

Justo ahora me estaba mirando como si fuera otra persona más, como si fuera alguien que no tenía importancia en la vida de el, un completo extraño.

O así lo podría describir yo.

Puse mis manos tapando mi rostro y las chicas de la cafetería seguían gritando, el bullicio era abrumador.

—Dame tu abrigo— dijo bakugo mirándome fijo.

—Eh? Disculpa?— ladee mi cabeza sin entender el porque.

—No andare sin camisa por ahí, dame tu abrigo , es mucho más grande que tú y lo más seguro que me quede— hablo el en su tono arrogante.

—Debes hacerte cargo del desastre que provocaste, tu abrigo, AHORA— lo último lo gritó, se podía notar su poca paciencia y lo fácil que se irritaba.

Baje la mochila de mis hombres y Me quite mi abrigo gris para entregárselo a el.

El lo tomo gustosamente y al tomar el Abrigo me dio una pequeña sonrisa.

—Gracias pequeña— dijo el. Me Crucé brazos y le di una mirada rápida a la cafetería, la gente aun seguía mirando la escena que este idiota había hecho.

Volví a dirigir la vista en el rubio, aún podía ver sus abdomen y me sonroje.

—Maldición— volví a decir.

Subió el zipper del abrigo, le quedaba algo apretado en los brazos pero parece que a él no le importaba.

—Ten— me dio su suéter manchado. —Lávalo, en la noche iré a tu dormitorio a buscar mi suéter y te entrego el abrigo— lo mire indignada.

—¿Acaso soy tu sirviente?— le dije. El me miro y soltó una risa burlona.

—No pero haces lo que diga— colocó su mano sobre mi cabello y lo revolvió un poco.

—Nos vemos en la noche Haru— se alejó, me quede viéndolo como se alejaba y se sentaba en una mesa donde estaban unos chicos, también estaba la puta de Gina, kirishima y Denki.

Me aleje y me senté con shinso.

—Supongo que las cosas van bien con bakugo— hablo shinso y se llevo una cucharada a la boca.

Lo mire en silencio.

—Supongo que las cosas con Gina no fueron tan bien— dije yo contestando a lo que había dicho.

El me miro sorprendido y luego regreso la vista al plato.

—Solo quería hablar contigo pero supongo que si lo hago a bakugo no le gustará, bueno, igual no me importa— volvió a comer una cucharada.

—¿De que querías hablar?— lo mire serio y entrelacé mis dedos bajo la mesa.

Hace un momento estaba realmente feliz por que iba a hablar con el pero todo se arruinó una vez que bakuidiota apareció.

—Vengo aclarar las cosas— dijo el y dejo la cuchara en la mesa. —Haru, entre Gina y yo no pasó nada, hubo veces que ella se insinuó conmigo pero solo soy hombre de una sola mujer— me miro tiernamente y sin perder la firmeza de sus palabras.

Pero sabía que eso no era verdad, no iba a creer tan ciegamente en lo que decía, de que si me gusta aún? Si, aún lo hace .

—No te puedo creer— dije y baje la mirada.

—está bien si no me crees, solo quiero que sepas lo que siento y que decidas lo mejor para ti— se quedó en silencio unos minutos.

—Si te vas con Bakugo ten en cuenta en las cosas que ese sujeto está metido, además de su rollo con Gina y su agresividad extrema y extraña obsesión pero si te quedas conmigo podemos tener una relación normal, estudiar juntos y hacer las cosas que nos gustan a ambos te amo y te amaré y te lo demostraré siempre—

Sus palabras me desconcentraron y me dejaron perdida.

—Irme con bakugo? De donde demonios sacas eso?—

—Se que fuiste a una fiesta y que ademas al irte te fuiste con bakugo, y ver la escena que acaba de pasar pues... confirma lo que me dijeron—

—Que te dijeron y quién fue?—

—Me dijeron que las cosas entre tú y bakugo estaban saliendo a flote de nuevo.— hablo seguro.

—Y quién te lo dijo?— estaba bastante molesta, tenía una ligera idea de quién podría ser.

—Gina...— hablo bajito y apreté mis dientes. Esa maldita perra. Perdóname Diosito por mi lenguaje pero me saca de quicio

—Y le vas a creer a ella?—

—no le creí pero ahora quizás debería empezar a preocuparme—

TóxicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora