Tóxico

Cap 35

Mi madre vio a bakugo como si aún no se lo pudiera creer. Creí que sería algo incómodo, sabiendo todo lo que había pasado durante todo este tiempo.

—Bakugo! Estás.. Estas aquí!— mamá miró a un lado de bakugo quién estaba Gina mostrando una sonrisa radiante.

Ganas de arrancarle esos dientes.

—Ella debe ser tu novia— dijo mamá mirando a Gina.

Bakugo puso una mueca. —Ella no es impor..

Gina lo corto antes que terminara de hablar.

—Soy la novia, un gusto— hablo ella sonriendo igual.

Apreté los labios para no reírme.

—Ah, ya veo, debes ser amiga de Haru— abrí los ojos de golpe de tan solo escuchar "amiga" y "Gina" en una sola oración.

Alce la mirada y me encontré a bakugo quién me miraba, se quería reír.

—Oh si! Somos muy buenas amigas— gina me dio una mirada rápida.

La mire mal de regreso. ¿Porque estaba diciendo eso? Y sobre todo, ellos que carajo hacían aquí.

—Ma, son tres años sin vernos, Es bueno verla— hablo bakugo dirigiéndose a mi mamá quien lo miraba feliz y desconcertada, el volteo donde mi papá. —Señor usted no ha cambiado casi nada—

Mi papá sonrió. Algo raro pero claro, Papá y bakugo siempre se llevaron bien, según papá, bakugo era como su hijo.

—Mi muchacho, has crecido mucho en estos años— papá se acercó a bakugo y lo abrazo por el cuello con un solo brazo.

—Y dime que haces aquí en la ciudad?— se metió en la conversación.

El rubio se quedó unos segundos en silencio y pensó bien lo que iba a decir.

—Necesitaba buscar algo en la ciudad que se me había perdido hace años— dijo el mirándome.

Yo solo mire a otro lado.

Shinso había escuchado todo la conversación y se le veía de malhumor.

En la conversación cada que bakugo decía "ma" el ponía peor cara.

—y dime katsu ¿cómo está tú madre? Deberías darme su número para llamarla de vez en cuando— hablo mi mamá y saco su teléfono de la cartera.

Bakugo sonriendo y complaciente comenzó a dictarle el número de su madre.

—Ella...ella está bien— respondió bakugo. —Ella me sigue regañando como antes— dijo lo último con un sonrisita.

—¡Tenemos mucho de que hablar! Qué tal si vamos a un restaurante y nos acompaña tu novia y tú?— manifestó mi madre y tomaba el brazo de papá.

Bakugo sonrió de oreja a oreja como si hubiera logrado su propósito. Chasquee la lengua y di unos cuentos pasos hacia atrás alejándome de Gina y bakugo.

Mama me miró y regreso la mirada hacia bakugo. Su mirada la intérprete como un "hablaremos más tarde"

Temo por lo que vaya a pasar.

—Por supuesto, ma— contestó bakugo.

—Mi Niño creo que no deberías decirme ma, quizás a tu novia no le guste— hablo mamá.

Gina puso su mueca de asco, mejor dicho su expresión natural. No apreste atención a lo que dijo bakugo después solo escuche risas de parte de ellos dos.

—A ella no debería importarle eso— miró a mamá con una sonrisa y volteó donde Gina mirándola amenazante.

—al menos no es tan estupida..— murmuro Gina. Mamá no la escucho pero yo si y me molesto mucho.