Si te ofrecieran irte por un año completo y dejar tu vida atrás ¿Lo aceptarías? La respuesta de Loto fue un rotundo: SÍ.
Luego de encargarse de la empresa de su padre a muy temprana edad y ser plantada en al altar, acepta la oferta de su progenitor...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Las luces me hipnotizan, estas se prenden y se apagan, varían su ritmo, desde el más rápido hasta el más despacio. Los colores resaltan sobre el verde oscuro.
Pero... ¿Por qué esta decorados con flores?
Sonrió de boca cerrada. Esto me huele obra de Camellia.
Me retiro del árbol de navidad y tomo asiento en el gran escritorio. Han pasado 3 meses desde que volví de Lago Cristal, nada ha cambiado dentro del gran edificio, cada día se elabora como sin nada fuera sucedido.
Pero, para mí la historia es otra.
Extraño estar rodeada de la naturaleza, escuchar los pájaros cantar afuera de mi ventana, madrugar todos los días a caminar y sobre todo los extraños a ellos.
Hendrick y Connor Reed. Cavaron un gran hueco en mi débil corazón.
En realidad, duele todavía todo lo que paso ese día en el hospital, sus frías miradas y duras palabras retundan en mi mente a cada instante. Trate con toda mi alma dejarlos atrás, pero como lo hago cuando ellos se adueñaron de mi corazón.
Hundo mi cara en la estructura de metal.
—¿Loto?
Alzo mi cabeza y me topo con mi asistente. Ella pinta una sonrisa en su cara y me extiende una invitación.
La abro sin titubear y me dispongo a leerla. Cierro el sobre.
—Llama a la secretaria del señor de Luca y acuerda con ella la cantidad de dinero.
—Sí, señora. — me acepta el sobre. — ¿Asistirá al evento?
—No lo creo. Mamá lo hará encantada. A ella ama a los niños.
—Bueno. —da un asentimiento y se retira. A mitad de camino se devuelve.
–Afuera hay alguien buscándola...
No presto atención a lo que dice, me desconecto y por una extraña razón siento que es él.
¿Ahora qué hago?
Bajo mí mirada mi atuendo, zapatos y todo está perfecto. Además...
