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Canción: Apocalypse - Cigarettes After Sex

Un mes después.

Miraba la televisión mientras esperaba que Justin compre unos chocolates que le ordene. Sostenía también una bolsa de sangre. He bebido en el día más de siete bolsas porque esta niña se alimenta mucho más de mi de lo que imaginé.

Mi móvil comenzó a sonar y comencé a moverme para tomarlo desde la mesa ratona del living.

—Mierda —maldecí.

Hice una mueca tratando de estirarme hasta que siento la puerta abrirse.

Justin se teletransporto hasta donde estaba y me alcanzó el móvil. Suspiré en alivio.

—Estabas por caerte, Avery. —su voz sonaba dura.

—No sabía cómo tomarlo.

Justin toco mi frente y una vez comprobando que todo este bien, me deposito una bolsa con chocolates. Sonreí mientras atendía mi móvil. Era una videollamada de mi hermano.

—Hola An, ¿como va todo? —pregunté viéndolo por la pantalla de mi móvil.

Ansel me sonrió mientras caminaba por lo que parecía ser el centro de la ciudad. A su lado, Lisa sosteniendo una bolsas de compras. Típico.

—Bien, de maravilla. ¿Cómo está mi esperada sobrina? Déjame ver tu barriga. —pidió.

Rodeé los ojos mientras alzaba mi remera para que pudiera ver mi panza.

—Ay por Dios, está enorme. —exclamó Ansel— Lis, observa la panza de mi hermana.

Lisa se asomó a la pantalla y al verme, chilló.

—¡Estas llevando una vaca dentro tuyo, Ronnie!

Comencé a reír y escuché como Justin desde la cocina hacía lo mismo. Pronto, Yuna apareció en escena subiéndose arriba mío y ocultando la videollamada. Era tan protectora conmigo desde que se dio cuenta que llevaba a alguien dentro mío. Aveces le gruñía a Justin y yo solo podía disfrutar de cómicas escenas.

—Quita a esa gata de mi vista. Déjame verla más. —Ansel dijo.

Iba a hacerlo, pero Jules dió una gran parada logrando que gimiera de dolor. Y pronto, sentir sus colmillos clavarse dentro mío.

—¡Joder! —grité.

Los pasos de Justin se hicieron rápidos y pronto lo tenia frente a mi mirándome preocupado.

—¿Que sucede? —se agachó hasta mi altura.

Hice una mueca de dolor mientras tiraba mi cabeza hacia atrás.

—Jules —jadee— está mordiéndome.

Justin corrió hacia la nevera y sacó dos nuevas bolsas de sangre. Al llegar, me las tendió y yo con mis dientes rompí el envoltorio y comencé a chupar con tal de que el dolor pare.

—Avy, ¿está todo en orden? —preguntó Ansel desde el otro lado.

Deje de tomar y solo pude asentir con la cabeza.

Seguí vaciando la primera bolsa y fui a por la primera. El dolor pudo cesar, y suspiré.

Cuando Jules tenía hambre, era el peor momento del día.

Volví a mirar hacia mi hermano el cual me miraba preocupado al igual que Lisa. Ambos habían dejado de caminar para observar la escena.

—He decorado el cuarto de Jules, ¿quieren verlo? —pregunté poniéndome de pie.

—Si te sientes bien, pues si. —dijo Lisa.

Me puse de pie para caminar hasta las escaleras cuando otro nuevo dolor aún más fuerte se hizo presente debajo de mi barriga.

Y luego, de entre mis piernas, un líquido se desplomaba entre mis piernas. Palidecí.

—J-Justin —mi voz temblaba.

Justin volvió y al verme, bajo sus ojos hasta el suelo mojado.

—Mierda —susurró.

Fue casi teletransportándose hasta la habitación para tomar el bolso preparado. Definitivamente, había roto bolsa.

—He roto bolsa —dije mirando a mi hermano— ¡Oh mi Dios! —exclamé de dolor.

—¡Dios mío, Ansel! ¡Avery va a parir a Jules! ¡Llama a Robert y a Roco y diles que preparen el jet! ¡Reacciona! —Lisa le gritaba a mi hermano y lo único que pude ver es que este estaba shockeado.

Decidí cortar la llamada ya que no podía contra el dolor.

Justin bajo a la sala y me tomó en brazos mientras de su espalda colgaba el bolso.

—Aguanta, nena. Ya estaremos en el hospital.

—No, no, Justin. No llegaré al hospital —exclamé ya empezando a sudar— ella quiere salir... ¡Joder! —grité.

Justin temblaba sin saber que hacer.

Las contracciones eran cada vez más fuertes. Con mi panza de solo cinco meses, Jules ya tenía la necesidad de venir al mundo. Ella claramente no era un niña normal y no se tomaba todo el tiempo como los demás bebés humanos. Ella ya estaba lista y yo no podía asimilarlo tan rápido, tan de repente.

Gemía de dolor y lo único que pude hacer es...

—L-Lévame a la cama —jadee— y haz lo que te diga.

Y así lo hizo. Justin me cargo rápidamente y subió las escaleras en un abrir y cerrar de ojos. Me colocó en la cama y me miro impaciente.

—Dime ya, nena. Me voy a cagar muriendo. Yo no soy doctor, maldita sea. Vayamos a un puto hospital y se acabó, Avery.

—¡JULES NACERÁ EN BREVE! ¿¡QUIERES QUE TU HIJA NAZCA EN LA CALLE!? —grité.

—Coño de la madre... —Justin rasco su cabello y me miró desorbitado— Dime ya que hacer.

Tomé aire mientras emitía muecas de dolor.

—Toma toallas, muchas. Una cubeta con agua tibia, agujas y una tijera. —jadee de dolor— ¡Rapido!

Justin lo hizo. Vi como se movía de un lado al otro mientras yo cerraba los ojos intentando aguantar más tiempo. Después de unos segundos, Justin apareció con todo lo necesario.

—No puedo creer que voy a hacer esto —susurró con su frente goteando sudor.

Lo miré y sentía como pronto las contracciones eran más fuertes.

—¡AHHH! —exclamé.

Las manos temblaba mientras colocaba toallas alrededor de mis piernas.

—Toma las palpitaciones de Jules primero —ordene.

Justin asi lo hizo. Colocó sus dedos en mi barriga y asintió.

—Listo, ¿ahora que?

Gemí de dolor.

—Méteme un dedo y fíjate si está de cabeza.

Justin tomó aire y metió un dedo. Sus ojos estaban concentrados en mi entrepierna y yo lo único que podía hacer es morir de dolor y tratar de controlarme para indicarle a Justin como proceder con el parto.

Estudiar Medicina tiene sus grandes ventajas.

—Si, ella está preparada. —concluyó.

Far Away | jb (Secuela "Coldwater")Donde viven las historias. Descúbrelo ahora