Far Away | jb (Secuela "Coldwater")

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Canción: Moral of The Story - Ashe

La puerta se abrió y la cara de Bruce se hizo presente delante de nosotros. Lucia cansado y con ojeras. De todos modos, desprendía ese aire de superioridad y misterio.

—Lamentó la tardanza. Hubo un imprevisto. —dije.

Bruce hizo una mueca aún sosteniendo la puerta de su apartamento.

—Siempre hay imprevistos en tu vida, bonita. —contestó Bruce, con total naturalidad.

Lamí mis labios mientras esquivaba su mirada. Odiaba llegar tarde a algún lado.

—¿Y a ti que te pasó? —Bruce dijo observando a Justin el cual estaba detrás mío.

—Soy parte de ese imprevisto. —respondió Justin.

Bruce asintió pensando. Luego, cayó en cuenta y se hizo un lado dejándonos pasar a su apartamento.

En silencio, Justin y yo lo hicimos. Al entrar, observe ello que tenía frente a mis ojos. El apartamento era sencillo pero a su vez acogedor. Unas pinturas lucían por todas partes, un sofá grande a mi derecha con un televisor tamaño promedio, y después una cocina pequeña con una mesa pequeña. Siguiendo, unas ventanas que daban vista a la ciudad y luego unas dos puertas que conducían vaya a saberse a donde. Supongo que al baño y a alguna habitación.

—¿Donde está ella? —pregunté.

Me di la vuelta y encontré a Justin observando el lugar. Bruce estaba parado viendo sus pies.

—Dándose un baño. —respondió.

—¿Salió del transe? —pregunté asombrada.

—Me anime a hacerlo. —Bruce respondió.

—Joe vendrá. —Justin acotó.

—¿Perdona? —ahora volví hacia Justin.

Justin dejó de ver lo que sea que estaba viendo para girarse y mirarme extrañado. Pronto su rostro se volvió serio.

—¿Que diablos te sucede con Joe? —Justin me miró mal.

Me crucé de brazos.

—Sucede que no me cae bien.

—Si es por lo de la carta puedes... —Justin dijo pero pronto lo interrumpí poniendo mi peor cara.

—Por eso y muchas cosas más. —dije.

Una puerta se abrió interrumpiéndonos. Al girarnos, Emily salió con el cabello mojado y vistiendo una remera de Bruce. Lo sabía porque decía ACDC en grande.

Emily al percatarse de nuestra presencia, paró en seco. Sus ojos se detuvieron en los míos y retrocedió hacia atrás.

—Em, espera... —me acerque a ella.

Emily negó.

—¿Cómo es posible que tú... tú... —ella susurró pero yo asentí entendiendo lo que quería decir.

—Si, lo sé. Se que es descabellado, loco, irreal. Entiendo perfectamente todo lo qué pasa por tu cabeza pero te prometo que podemos... —comencé a decirle a medida que me acercaba a ella pero pronto se alejó aún más.

—Solo déjame explicarte Em, tu no corres peligro ni ningún otro humano con alguno de nosotros. —dije.

Emily comenzó a llorar y todo mi corazón se achicó. Sentí los pasos de Bruce que pronto se acercaron a ella para tomarla de ambos brazos y reconfortarla. Sin embargo, Emily no se inmutó. Es como si de Bruce no tuviera miedo. Su tacto no le hizo nada.