Aeternum [Experiencia en mi RD]

Capitulo 43.

Yulle Ball 3.0

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Esté fue mi ultimo Yule Ball.

Para muchos puede ser aburrido la idea de tener bailes de invierno todos los años, al principio para mi fue igual de tedioso.

Esté iba a ser un baile normal, de gala. No iba a ir sola, iba a ir con los gemelos, obviamente.

Justin me pidio ir con él, pero como no le conteste, supuso que lo nuestro no funcionaria. Por más que Justin fuera mi tipo, emocionalmente no lo era.

Esa noche, Luna estaba en mi habitación, haciéndome compañía en lo que me alistaba para el baile.

Me puse un vestido rojo, era pegado de la cintura para arriba pero en la parte de abajo era con cola de sirena. Mi cuello era adornado con un collar dorado, que hacia juego con los tacones.

Me planche el cabello ya que siempre estaba rizado y esponjado.

Luna iba con un vestido rosa con flores amarillas, se veía muy tierna.

―¿Con quien iras al baile, Naho?―pregunto la hermosa rubia.

―¿Con quien crees? Pues con los gemelos.

―Todo esto me recuerda al cuarto año, donde solo pasabas tiempo con ellos.―comento con una sonrisa.

―Ja, a mi tambien me recuerda mucho a esas épocas, pero las cosas han cambiado mucho.

―Y seguirán cambiando, contigo aqui, dudo mucho que la diabla deje las cosas así para siempre.―cito sabiamente.

La mire con confusión y le sonreí.

―Te veo allá, Naho.―concluyó la conversación y se fue de mi habitación.

Cuando ya estaba lista recordé que había dejado mis zapatos en la sala común, se los había mostrado a Blaise y por una u otra razón los había dejado abajo.

Tengo la maña de llegar a un sitio donde me siento cómoda y quitarme los zapatos.

Salí de mi cuarto y no había nadie, solo Draco, quien estaba mirando a la chimenea mientras tomaba una botella de Vodka.

Se veía muy mal.

Me dolió verlo así, pero no iba a mostrar interés, ni le iba a preguntar nada. Él me vio bajar las escaleras y luego volteo nuevamente a la chimenea.

Busque lo más rápido que pude mis zapatos, cuando en eso se escucho como golpeaban una botella contra la chimenea.

―¡¡Mierda !!―maldijo, Draco.

Se levanto y camino rápidamente hacia mi., acorralándome a la pared.

Cerré los ojos con terror y cerré los puños con fuerza. No le tenia miedo a él, en lo absoluto, pero ese tipo de escena la vivía la mayor parte del tiempo.

―Malfoy, muévete, por favor.

Draco me miraba con tristeza, estaba demasiado borracho.

―¿Por qué nunca me escuchaste? Tenía una explicación y me mandaste a la mierda.

―Tú lo hiciste primero, yo solo te devolví el ataque. Ahora, muévete, Malfoy, apestas a Alcohol.

Me quise mover pero me tomo las mejillas y me beso. A lo que respondí alejándolo de mi.

―Te necesito, te necesito, Nahoma.

Quería llorar, las lagrimas llenaron mis ojos, Quería decirle que yo tambien lo necesitaba, lo quería, lo amaba y lo extrañaba.