Capítulo 32.

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Colibrí.

Mis días en la mansión Malfoy fueron escasos, realmente sólo pase año nuevo y al día siguiente me fui a casa.

Al regresar de vacaciones de invierno,  
Umbrigue tenía más poder que antes.

Había más restricciones. Siempre he pensado que la escuela es como una prisión, cumple con ciertas características que las hacen casi similares, la diferencia es que en una resguardan criminales y en otra preparan a la gente para seguir una rutina de por vida en la cual sus vidas sean miserables. Dependiendo lo que estudies.

Bueno, Umbrigue ocasionaba  en mi ese sentimiento de estar en una prisión.

Por lo general yo me encargaba de quitar o romper los reglamentos colgados en la pared.

Pero deje de hacerlo cuando detención se convirtió en una tortura medieval.

.

Esa tarde antes de ir a las clases con Harry vi a Draco estudiando en la biblioteca.

―¡Hola Malfoy!―salude.

―¡Hola!

Me acerqué a él con la finalidad de convencerlo a unirse al ejército de Dumbledore.

―¿Haz pensado en lo que te dije hace unos días?―pregunté.

―Sí, y mi respuesta es no.―musito sin siquiera mirarme a los ojos.

―¿puedo saber el por qué?

Malfoy cerro su libro y me miro.―¿De qué sirve, Nahoma? Además tengo muchos conocimientos sobre la magia y duelos, es algo tan sencillo para mi.

―Bien pero puedes mejorar en esos aspectos. Por favor, Draco, sólo una clase.―le sonreí y el me torció los ojos.

―Bien, sólo una clase.

Me acerqué a darle un beso en la mejilla y me fui de la biblioteca.

.

En una de las clases que tuvimos con Potter nos tocó aprender el encantamiento patronus.

―piensen en un recuerdo muy poderoso, algo que los llene de felicidad.―comentó Harry.

Mientras estabamos en esa clase Draco estaba molesto pues no sabía que hacer o que recuerdos usar.

―Sólo piensa en algo que te haya hecho muy feliz. Por ejemplo yo uso el recuerdo que tengo con mi hermano, Cedric, donde nos pusimos a fumar hierba.

―Tu funciona así, Nahoma, yo no.

A Draco no le gustaba estár con ellos, podía sentir su incomodidad a kilómetros.

La mayoría de los chicos y chicas del ejército de Dumbledore lograron hacer su patronus.

Hermione camino hacia mi dirección y me tomo del brazo.

―Lograste convencerlo, bien hecho.

―Si lo sé, pero es complicado, Malfoy no tiene recuerdos buenos.

―Sólo no des todo de ti para el cumpla sus metas o cualquier cosa que tenga en la cabeza.

―¿Por?―pregunté con curiosidad.

―Evita un desgaste emocional, sólo eso.

Levanté la ceja en señal de confusión y Hermione  torció los ojos con fastidio.

Aeternum [Experiencia en mi RD] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora