━✧Feria✧━

125 11 26
                                    

Carlisle Justiniani

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Carlisle Justiniani

Nahin había cubierto mis ojos con una de sus bandanas negándome completamente la visión. No sé cual era su maldito propósito, pero el jueguito de la "Gallinita ciega", no era lo mío.

—¿Confías en mí, cierto?—La maldita diversión reinaba en su voz, mientras me sujetaba las manos para ayudarme a caminar. 

—Créeme que no te hubiese dejado ponerme esto en los ojos si no lo hiciera.

—Que linda—me susurra al oído.  Noto que se posiciona a mi espalda, posando sus manos en mi cintura. Sé que es algo tan básico, pero amo cada vez que lo hace, es como si sus manos me pasaran electricidad, no sé que es lo que hace o ya son tonterías mías, pero se siente tan bien.  Cualquiera te toma de la cintura, pero no cualquiera te transmite esa vibra electrizante.

—¡Deja de hacer eso!—me quejo

se ríe—¿Qué cosa?

—No te hagas el idiota, Nahin.—Está aprovechando tal posición, para refregarse contra mi trasero

—Te juro que lo amo

—Y vas amar más, el moretón que te voy a dejar de un golpe, sino cuidas mis pasos

—ya, que gruñona.  Ahora con cuidado que vas a subir al auto.

Mientras conduce, nadie dice nada, ambos nos sumergimos en un silencio, disfrutando de la canción que suena.

De la nada, una sensación inexplicable, pero acogedora, me abraza, haciéndome sonreír, sin saber el porqué.  Son de esas sensaciones que no sabes describir, pero que te hacen sentir diferente, de esas que te erizan la piel y te ponen el corazón a bombear a mil, regalándote una alegría encantadora.  Y por supuesto que sé el porqué, pero creo que no me atrevo a admitirlo, no sé en qué momento pasé de odiarlo a que me encante tenerlo cerca, que me encante que me mire con esa forma tan estimativa, tan dulce, tan maliciosa y tan expresiva.  Que me encante sentirlo, no sé en que momento pasé, de a ni siquiera querer verlo a sentirme tan bien a su lado, a sentir corrientazos cada vez que su piel roza con la mía, a que me encante la forma en que sus labios me envuelven y me hacen saborear sus besos.

Y no puedo creer lo que voy a decir, pero aunque llega a inquietarme un poco, me gusta cuando sus brazos me rodean y me envuelven en un abrazo cálido.  Definitivamente Nahin Pines, me ha enculado.

Ya que ando cegada, me toca hacer uso de mis otros sentidos.  No es hasta cuando pasan 8 canciones, que lo siento estacionarse, a la vez que percibo el sonido que hace cuando se desabrocha el cinturón.

—Llegamos—avisa.

La puerta se abre y en menos de 30 segundos, abren la mía, percibiendo la brisa helada que me eriza la anatomía.  Los dedos de Nahin, tocan la piel de mi mano, con suavidad, trasmitiéndome el calor de su cuerpo, que ridículamente, se encuentra frío.

Lullaby: Don't break 《REESCRIBIENDO》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora