TARDANZA

73 12 0
                                    

Abri la puerta de mi habitación y vi que el hombre que me cuidaba estaba durmiendo sentado en una silla. A paso silencioso decidí salir y cerrar la puerta, pero en eso al dar la vuelta para salir me atrapa con las manos en la masa Hyejin, pero me hace una seña para que no haga ruido así que aguanto mi sorpresa.

Sin hacer ruido bajamos las escaleras y ahí hablamos:

- ¿Qué hacías saliendo?
- Iba a ir por algo de comer, tengo hambre.
- ¿No has cenado?
- No.
- Te dije que cenaras, es medianoche.
- ¿Por qué sales tan tarde?
- Porque tengo trabajo que hacer en la empresa.
- ¿Ya cenaste?
- No.
- ¿Cenas conmigo?
- Sería un honor.

Nos dirigimos a la cocina y al parecer todos dormían a esa hora o por lo menos unos cuantos no, quienes vigilaban la casa.

Ella tomó la taza que estaba guardada y tomó la misma que he estado usando y me miró a ver que deseaba:

- ¿Leche?
- Sí por favor.

Comenzó a servir nuestra cena y luego comimos tranquilamente hasta que yo decidí dar el primer paso:

- ¿Qué hacías en mi habitación?
- Veo que ya te adueñaste de esa habitación ¿Eh?
- No es eso, o bueno, quizás sí, por un año.
- No hay problema.
- Entonces... ¿qué hacías por ahí?
- Iba a ver simplemente como estabas.
- Pues estoy bien vivita y coleante.
- Al parecer si.

Una vez terminamos de cenar me ofrecí a lavar los trastes, pero me dijo que lo haría ella. Tenía una paciencia al hacerlo como si no quisiera romper nada de lo que hay en su casa.

- Ahora si a dormir Wheein... No puedes estar toda la noche despierta.
- Pero puedo dormir hasta tarde.
- ¿A qué hora te despierto?
- Yo me levanto por mi cuenta.
- ¿5 minutos más?
- Significa largo y déjame dormir.
- Un significado profundo.
- Muy profundo.
- Vamos...

Al llegar a la habitación el hombre nos vio y se sorprendió al verme fuera de la habitación:

- Lo siento señorita Ahn.
- Tranquilo, descansa.

Entramos sin decir más y ahí me acobijó una vez que entré a la cama, luego miró alrededor y me preguntó:

- ¿Ya pensaste que quitar o poner?
- Ya pensé en como dejarte en quiebra.
- ¿Cómo?
- Quiero pintar las paredes ¿Puedo?
- Claro, puedes hacer todo lo que quieras sin problemas.
- Quiero hacer una remodelación completa o mejor dicho diseñar las paredes.
- No hay problema Wheein, mañana podemos ir después de desayunar ¿qué te parece?
- ¿Podemos?
- Apuesto a que quieres ir a comprar tu misma los materiales, saldremos.
- ¿Enserio?
- Sí.
- Eso es genial!!!- grité de emoción.
- Me alegra que eso te ponga feliz.- sonrió.
- Muy feliz.
- Ahora descansa para desayunar temprano y volver aquí para almorzar ¿vale?
- Entendido.
- Buenas noches.- me dio un beso en la frente.
- Buenas noches.

TE QUIERO CONMIGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora