CERCANÍA

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No podía alejarme de ella, quería saber de ella en todo momento. Quería entrar, pero no me lo permitían los médicos, cuidados intensivos era el peor lugar, habían más habitaciones con diferentes casos, pero sentía que el mío era el peor de todos.

Todo es tu culpa..

Escuchaba susurros como esos en mi cabeza. No había nadie a mi alrededor así que sabía que todo era parte de mi, pero se sentía tan jodidamente real que me dolía, además de ello sabía que realmente todo era mi culpa, ella se había arriesgado por mi culpa, ella no era el objetivo de ese tipo, él me quería a mi, no a ella. La que debió intentar huir era yo.

Yo era quién debía recibir los golpes, cortes y hasta quizás debía de salir violada entre tantos intentos fallidos por intentar escapar. La que debió sufrir físicamente y psicológicamente de esa manera era yo, nadie más que yo misma.

Yo no debía entrar en su vida de esta manera, desde que comenzamos esto sabíamos que las cosas no serían fáciles para ninguna de las dos. Para mí no era fácil estar lejos de mi familia y vivir en un país que no conozco. Pero eso sí, para Hyejin todo era diferente y quizás peor. Ella sabía que no sería correspondida por mí nunca, sabía que haría mis berrinches, sabía que le gritaría e insultaría.

Mierda...ya ha pasado un mes y no sé qué hacer realmente con mi vida. Tan solo sé que me tienen vigilada en todo momento los guardias, se turnan en todo momento, me traen comida para que siga sobreviviendo a pesar de que no doy muchos bocados porque siento que no debería mientras ella no da bocado alguno de algo delicioso, tan solo se alimenta a través de unos cables.

- Señorita Jung.
- ¿Si? - pregunto sin mirar atrás.

No le quito en ningún momento la mirada de encima a Hyejin desde la ventana, estoy atenta a cada uno de sus movimientos o quizás si una máquina falla, quiero estar atenta a todo ello porque algún movimiento en falso y puede poner su vida en mayor riesgo. Ya mucho hace ella tratando de sobrevivir.

- Ya ha pasado un mes desde que la señorita Ahn está ahí dentro ¿Desea pasar a verla?

Ahí volteo con esperanza, quería hacer eso desde aquel día que la vi ahí dentro.

- ¿Puedo?
- Solo serán unos minutos, le daré 15 minutos debido a que no puede estar ahí.
- No hay problema. Gracias doctor.

Me da el equipo necesario para entrar y cierra las cortinas para darme privacidad, pero eso sí, me dijo que será todo exacto para evitar problemas así que debía medir mi tiempo bien.

Ingresé y realmente no pude evitar correr hasta dónde ella se encontraba. Ahí la Vi de cerca claramente y no pude evitar llorar, ella estaba de lo peor ahí en coma y yo aquí despierta y sin ningún rasguño.

NARRADOR

- Hyejin~ lo lamento tanto enserio... Lo siento por traerte problemas en todo momento, sé que soy una mala persona y sé que me dirás que no lo soy aún sabiendo que eso es mentira. De todas maneras necesito oir eso ahora mismo. Necesito que me digas que todo está bien y que no pasa nada malo.

Las lágrimas no la dejaban ver con claridad así que en todo momento limpiaba su rostro.

Cuidadosamente tomó el rostro de la morena entre sus manos y le dió un beso en la frente de manera suave sin hacer nada brusco, tenía miedo de romper alguna máquina.

- Por favor despierta Hyejin... Enserio te necesito conmigo... Prometo no ser mala contigo, seré la mejor para que no pase nada malo, te haré sentirte orgullosa de mi, haré lo mejor.

No había respuesta, ni un solo movimiento. Tenía la esperanza de que despertara con ella a su lado, pero al parecer eso no sería posible.

- Estoy contigo Hyejin, no me he ido en ningún momento así que tú no lo hagas ¿Si? Debes despertar para salir a pasear juntas, te voy a invitar carne y podemos beber hasta morir juntas ¿Si? Haremos de todo así que por favor despierta.

De pronto escucha la puerta abrirse y sabía que era la señal, debía salir de aquella habitación así que volvió a darle un beso en la frente.

- Estaré afuera así que no te preocupes por mi ¿Si?

Sin más dejó aquella habitación junto con el médico, le entregó la ropa y volvió a su misma posición, estar de pie frente a la ventana mirando a la mayor.

TE QUIERO CONMIGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora