- Por cierto Wheein...- estaba dudando, no sabía si decírmelo o no.
- ¿Qué sucede? - pregunto de todas maneras.
- Ayer vi que guardaste en la entrada algo rápido en tu mochila.
Oh no! Dios! Si le digo eso hay probabilidades que se enoje y no puedo permitir eso de nuevo.
- No es nada importante enserio. Sólo eran mis materiales.
- ¿Enserio? - alza una ceja, mirada penetrante, un poco de terror.
- ¿Si? - soy una idiota!
- Dime la verdad y te llevo a donde quieras. - toma mi barbilla.
- Uhmmm...ya sabes...solo es la nada... - estaba más que nerviosa con su cercanía.
Con Hyejin avanzamos de poco en poco o quizás rápido, no lo sé. En Corea es normal el contacto físico entre chicas, algunas pervertidamente de juego y otras más cariñosas, pero no lo vemos en el sentido de gustarnos o quizás algunas no dicen claramente su orientación sexual, pero bueno... Yo no soy nada pervertida y si a mi me hacían algo coqueto terminaban perdiendo porque puedo ser más coqueta que el resto y terminan babeando por mi, por mi inigualable belleza.
De todas maneras, Hyejin a veces es muy directa conmigo, además de que sé que le gusto como mujer. Pero trato de acomodarme, trato de que no se sienta incómoda y yo de igual manera, es amistad lo que yo veo, no más, se lo he dejado claro desde un principio. Cuando ella me toca o abraza se siente diferente, me pone nerviosa por el simple hecho de gustarle, a veces temo que se sobrepase, pero no lo hace, me respeta al 100% y lo agradezco mucho enserio.
- ¿Nada Wheein? ¿debería creerte eso?
- ¿Si?
- No, no debería creerte eso ¿Quieres que te castigue?
Ay no por favor! ¿Por qué me dices la palabra castigar con una sonrisa pícara? ¿Qué mierda está pasando por tu cabeza Hyejin? Me asustas!
HWASA
No quise averiguar las cosas de la Universidad, prefiero que ella me las cuente. Mi personal me informa tan sólo si las cosas son demasiado malas y sospechosas, por ello no me dijeron del castigo que tuvo.
En la puerta de ingreso y salida vi que metió una bolsa se regalo rápidamente a su mochila y eso me llenó de curiosidad y celos porque Wheein me gusta demasiado y no quiero que nadie la mire de la forma en que yo la veo, quiero que sea sólo mía y de nadie más.
Ahorita la tengo cerca a mi rostro y mi coquetería enserio no deja de fluir, me gusta demasiado, me muero por besarla pero la respeto, no quiero que me odie, eso lo odiaría mucho.
¿Castigo? Debo estar totalmente loca por haber dicho eso. Me da hasta vergüenza recordarlo en ese momento y más cuando la sigo teniendo frente a mí. De todas maneras la conozco y sé que hablará.
- ¿Y si mejor es al revés? - me recuesta en el grass y siento mis mejillas arder.
- ¿Wheein? - pregunto algo nerviosa.
- Yo pienso castigarte si sigues dándome un interrogatorio Hyejin. - sonríe coqueta.
Me va a dar un infarto si la sigo teniendo de esta manera, lo peor, puede que me vuelva loca y haga una total locura con ella. Además...¿no ve que tengo una manada de empleados mirándonos? Eso me da más vergüenza.
- ¿Estas coqueteando conmigo?
- Nop. Sólo que sé cómo dominarte a la perfección. - joder Wheein, me vas a poner más caliente de lo que ya estoy!
- Wheein sí no sales de encima mío enserio voy a cometer una gran locura y voy a recibir una buena cachetada tuya. - tenía que decirlo, no quiero que se incomode y moleste.
- Oki, me bajo.
Se alejó y pude respirar más tranquila aún sin levantarme, me cubrí el rostro y comencé a contar hasta 10 lentamente para establecer mis pensamientos y necesidades, debía pensar en algo que no fuera Wheein encima mío siendo coqueta y traviesa.
WHEEIN
No pensé que mi actuar fuera aquel, no estaba en mis planes ponerme sobre ella, tan sólo mi cuerpo hizo lo que quiso y yo seguí el juego. Prácticamente como lo dijo, parecía que yo estaba coqueteando y seduciendola, cosa que no estoy haciendo en absoluto. Eso sí, no mentí cuando dije que sé dominarla, es fácil, tengo que jugar con ella, Hyejin me tiene en un pedestal y yo puedo jugar con ella a mi estilo.
Un momento...¿jugar con ella? ¿Qué coño estoy diciendo? Mi mente ahora sí que está revuelta y me siento tan mala ¿cómo que jugar con ella? Eso me hace ver tan mala! No soy mala! Soy buena onda!
- Ya me calmé...
La miré y volví a cambiar el rumbo de mi mirada, sentía mis mejillas arder.
- Creo que perdí.
- Sí te cuento lo que pasó te vas a enojar...
- No lo haré, lo prometo.
- ¿Y si lo haces?
- Me golpeas.
- Me parece un trato justo.
- Cuéntame. - recuesta su cabeza en mis piernas. Enserio a veces se pasa de la raya, pero la dejo.
- ¿Recuerdas que le ayudo a un profesor coreano?
- Tsk! - vi su rostro, se estaba molestando.
- Ya no te cuento nada.
- No estoy molesta.
- Sí lo estás! Te estoy viendo.
- Aish...pero no estoy diciendo nada.
- Él me regaló algo, pero ni sé que es, no lo he abierto aún.
- ¿Y qué hace regalándote algo?
- Di la verdad ¿Te estás enojando?
- Me siento fastidiada y molesta, pero no quiero que lo notes y me golpees. No haré nada malo.
- Que bueno que estés así porque sino me molesto mucho contigo.
- No quiero eso.
- Muy bien, buena niña. - acaricio su cabeza suavemente.
- Me gusta eso~
- Entonces ya no lo hago. - quito mi mano.
- Wheein~ por favor~ - me mira tiernamente.
- Aish...contigo no se puede. - vuelvo a hacer la misma acción.
- Sólo un rato, es relajante.
- Vale, vale. Te lo ganaste.
Y así estuvimos cerca de media hora, enserio que es demasiado mimada, le gusta que le den cariño y una aquí de esclava dándole cariño incondicional ¿incondicional? Por favor... pff...Yo sólo me gano el alimento del día. Eso, me gano mi estadía. NO PIENSEN OTRA COSA!
