Capítulo 4

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E N T E R T A I N Y O U

Quieres una batalla, pero vas a perder una guerra
Vete al infierno, no estoy aquí para entretenerte
Simplemente aléjate o enfréntate al enfrentamiento
No me inclinaré, no me importa la hemorragia,
porque nuestra libertad es invicto

—¿Cuál es tu nombre?

—Caleb —el chico frente a él asiente con una mirada perdida en algún punto de sus pensamientos. Es como si analizara a fondo la pared contraria intentando descifrar si la madera es de roble —dijste que Joshua era un... príncipe —murmura la última palabra, porque aún no puede creer que todo lo que ha escuchado y visto, es real.

—Existen cuatro clanes: Sorgina, son los más antiguos, se podría decir que fueron los primeros en existir. Ellos son... muy estrictos con respecto a las reglas, no matan a menos que sea por pura supervivencia. Fundaron el Consejo —Caleb abre la boca para preguntar, pero Jasper levanta la mano impidiéndoselo—. Iremos por partes. Espera. —Caleb asiente—. Después están los Varju, son los más vanidosos que puedas conocer. Casi todos están metidos en el mundo de la moda y son los únicos que disfrutan vivir entre humanos. No se meten con nadie y es muy raro encontrarlos. Después tenemos a los Kuolema. —Jasper suspira—. Son los rebeldes. Si el Consejo pone una regla ellos son los primeros en romperla. Matan por pura diversión. Son mentirosos por naturaleza, solo saben engañar y son egoístas. No ayudan a nadie que no sea de su clan. Y... finalmente, los Aljins. Digamos que tienen un alto apetito sexual, Chris dice que son como perras en celo y creo que no hay una mejor manera de describirlos —admite con una sonrisa tímida—. Viven en los límites de las reglas, mantienen esclavos digamos... sexuales. Personas que vuelven adictas a su sangre, como tú y de quienes... carraspera—, abusan... —Caleb asiente como si no se tratara de él de quien están hablando—. Cuando se cansan de ellos, los convierten y buscan nuevas víctimas.

—¿Y el Consejo?

—Es algo así como la junta directiva de todos los vampiros. Cada clan tiene un líder llamado príncipe. Es el más antiguo entre ellos y es quien los dirige, pero el Consejo está por encima de ellos, conformado por los llamados Antiguos. —Sonríe—. Hay tantos términos e historia que no puedo explicártela ahora, así que lo hago lo más simple que puedo.

—Está bien, te lo agradezco —acepta devolviéndole la sonrisa.

—El Consejo decide las reglas y los castigos para quienes las rompen. No se reúnen muy seguido, solo cuando algún vampiro se ha salido de los límites y deben buscar un castigo que siempre involucra al Celat.

—¿A él?— pregunta señalando como si Christopher estuviera a su lado. Jasper asiente un par de veces. El castaño se dispone a preguntar por él, por ese chico que lo salvó aunque no se sienta a salvo, pero la ventana detrás de él se abre y el rubio se asoma mirando a Jasper .

—Cierra la boca. Lo digo en serio, Jasper. No me importa si estás fuera de los límites.

—Ah, volviste. Supongo que el hambre no desapareció mágicamente y viniste a ver si está listo el almuerzo, ¿cierto?

—Volví para cerciorarme de que no digas cosas que no le incumben. Y tú —Señala a Caleb—, no creas que me olvido de las cosas. Estás aquí de paso, así que no te pongas cómodo. Para cuando vuelva esta noche, no te quiero ver aquí o los Aljins serán tu menor preocupación.

Jasper exhala cuando la ventana vuelve a ser cerrada con brusquedad.

—Soy Jasper, por cierto. Ese maldito malhumorado es Christopher. No le hagas caso, no dejaré que te eche de aquí.

BáthoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora