Come my way「NoMin」

36. Confianza

¿Qué harás esta noche?

Será mejor que digas "hacértelo bien".

No quiero hacer que te quedes despierto

Pero muéstrame, ¿puedes mantenerla erecta?

Porque entonces tendré que hacer que te quedes despierto

Mierda, tal vez haré que te quedes despierto

Fóllame hasta el amanecer.

34+35

Lo bebes como si fuera agua

Dices que sabe a caramelo...

Ariana Grande, 34+35.

🩸❤️❤️‍🔥

⚠️Contenido ALTAMENTE EXPLÍCITO⚠️

Todo es ficción, por favor no tomen este ni ningún otro fic como una guía. Si tienen dudas sobre el sexo consúltenlo con un especialista.

👑Jeno bottom/ Jaemin top👑

Por favor por favor por favor 🙏🏻 sino toleras el JAENO no leas y en especial no comentes cosas desagradables. Evítenme la pena de borrar comentarios, este capítulo lo hice con muchísimo cariño y esfuerzo. Dejemos disfrutar la lectura a los demás y sigamos haciendo de este fic un espacio libre para que todos podamos expresarnos con respeto. ❤️

Y si eres terco como la chingada y quieres leer saltándote la parte del sexo, llega hasta el primer separador con confianza.

Gracias por su comprensión y, ¡Disfruten la lectura!✨

💫💖⚡️

Me esforcé bastante para que sus palabras no me quitaran el sueño o espantaran las ganas de ser al que partieran en dos.

A la media noche, después de encerrarnos en la biblioteca a leer (y besarnos) nos refugiamos bajo las sábanas de su cama y al principio no estábamos abrazados, sin embargo, de alguna manera despertamos acurrucados. El descubrimiento nos puso tímidos, especialmente a Jaemin, que se esforzó por hacer de cuenta que no había sido él quien enredó sus piernas en las mías y acomodó su mejilla contra mi pecho. No lo mortifiqué y lo dejé pasar. Debe ser tan nuevo para él como lo es para mí.

Ambos nos dimos una deliciosa y relajante ducha caliente con su regadera de hidromasaje (los ricos tienen algún que otro privilegio que no me desagrada) y me prestó uno de sus finos y costosos trajes para usar en la escuela. No nos dio tiempo para desayunar, así que sólo tomamos un licuado de frutas y una barrita energética. Obtuve otro privilegio al conducir su despampanante Jeep y Jaemin se pasó el trayecto tarareando canciones y tamborileando los dedos sobre los míos en la palanca de cambios.

Ya en la escuela, tuve que convertirme prácticamente en su asistente. A las diez le llevé café, a las once un emparedado sin orillas de la cafetería (¿Quién demonios se come el pan así?) que comimos entre los dos porque él no quiso terminárselo y, a la una, prometí pasar a su salón para llegar juntos al ensayo de la obra. 

Ninguna de las acciones anteriormente descritas, fueron pedidas por él, más bien mi creciente preocupación es la que me motivó a ahorrarle el bajar y subir escaleras entre descansos. Jaemin asegura sentirse perfectamente y hasta camina como si nada, lo que me preocupa todavía más. Lo vi ponerse los zapatos en la mañana y el golpe dejó de estar rojo para pasar a oscurecerse. Prácticamente tuve que rogarle para que se pusiera de nuevo las vendas y la tobillera.