La falsa y su harem [Completa]

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—Oh, estoy aburrida.

Rose Michael Ilyde, la Emperatriz, estaba tomando un baño de pies con el vestido enrollado hasta las pantorrillas.

Dos sirvientas le lavaban los pies con cuidado con agua tibia. Y en una silla un poco más alejada, su hermano Alberto Michael se sentó en una posición torcida.

—El aburrimiento es breve, hermana. Pronto verá algo divertido.

El final de los labios de Rose se elevó en diagonal.

—Le pedí que la enviara lo antes posible con el pretexto de un aborto espontáneo, para que esté aquí al menos en una semana, ¿verdad?

Rose recordó el rostro de la Santa Ariel.

El banquete de cumpleaños del príncipe Kyle. En ese momento, hubo un incidente que fue justo para rebajar su reputación, pero todo se vio frustrado al proteger a Kyle con una cara descarada.

« Es una perra.»

—Es demasiado para un santo falso.

Rosé le dijo a Alberto con una sonrisa venenosa.

—No sabía que tú, el sinvergüenza del Conde Michael, jugarías un papel tan crucial. Esta hermana está muy feliz. Estaré muy agradecida cuando esto termine.

Alberto dijo, encogiéndose de hombros.

—El santo y el Sumo Sacerdote habrían pensado que se acabaría si mataban a la doncella que conocía el secreto. Bueno, ¿quién sabe? Pensar que esa chica estaría obsesionada conmigo.

La atracción femenina por Alberto era extremadamente severa; había cambiado de mujer con el gran trasfondo de ser hermano de la Emperatriz, incluida Annie, una de las sirvientas del templo.

Tenía una cara bonita, así que a veces se reunían para divertirse cuando iba al templo.

Luego se enamoró de él y empezó a darle regalos que no encajaban con su posición.

Cuando le preguntó de dónde había sacado el dinero para regalarle zapatos de 500 francos, le contó una historia muy sorprendente.

El secreto es que la santa actual es una santa falsa, y que está pagando mucho dinero para hacer la vista gorda ante quien lo sabe.

Bien podría inferirse de las palabras de Annie que la Santa es una mujer estúpida e inocente.

Unas semanas después, Annie desapareció.

« Es un poco molesto, pero bueno.»

Después de escuchar los hechos de Alberto, Rosé había estado pensando en ello todo el tiempo. ¿Qué obtendría del Sumo Sacerdote usando este enorme secreto como excusa?

Sin embargo, en el espinoso banquete de cumpleaños del Príncipe Kyle, después de ver los movimientos secretos de los dos y el santo protegiéndolo, decidió usar este hecho para algo más grande.

Porque si Kyle está involucrado, podría ser una gran causa para atacarlo.

Y tomó como testigo a un sirviente que sabía que Kyle le enviaba cartas al santo falso. El sirviente testificó que Ariel le había escrito varias cartas a Kyle.

—Es inevitable que el poder divino del santo desapareciera y apareciera un nuevo santo...

Rosé endureció las cejas y levantó las comisuras de la boca.

—Es una historia diferente decir que ella era una santa falsa en primer lugar.

Alberto respondió con una mirada fría hacia ella.