La falsa y su harem [Completa]

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Cass caminó por el amplio y vacío pasillo hasta la cima de la torre.

Cuando abrió la puerta, vio a su padre acostado en una cama en la habitación oscura, y una sola criada a su lado cuidándolo.

Al ver a Cass, la criada rápidamente inclinó la cabeza y salió de la habitación.

—¿Estás aquí?

Se escuchó una voz ronca de la boca del anciano padre.

Luther Lloyd, jefe de Lloyd y padre de Cass. Y ahora la luz de la vida se desvanece gradualmente, mientras la maldición de la familia Lloyd continúa de generación en generación.

—¿Cómo te sientes?

—Bien. Ahora parece que Salerium está a la vista. No hay miedo ya que es el camino que recorrieron nuestros antepasados.

Cass asintió.

Era el camino que debían recorrer todos los hombres de la familia Lloyd.

En algún momento, aparece una enfermedad absoluta con la que ni los poderes divinos ni espirituales pueden tratar. Fue el precio del pecado heredado de ancestros lejanos.

Su padre se enfermó cuando llegó el momento, y durante mucho tiempo Cass, el dueño menor de la empresa, estuvo a cargo de todo el trabajo en la cima.

—Cuando llega el momento de morir, todo tipo de pensamientos pasan por mi cabeza.

—....

—La niña que acaba de irse. Le pedí que dijera algo porque me sentía solo, y me contó sobre el chico del que estaba enamorada.

Era una joven sirvienta que parecía tener unos dieciséis años.

—¿Dijo que su corazón latía con fuerza y ​se sentía confusa? Quizás tu madre también se sintió así por mí.

Cass no tenía muy buenos recuerdos de su madre. Sin embargo, no sintió resentimiento hacia su madre por dejar a su padre.

—Siento que no he visto el mundo por completo porque he estado viviendo como una persona ciega. Solo cuando llega el momento de morir, esta sangre es tan injusta.

Otra maldición transmitida a través de la sangre de Lloyd fue la incapacidad de sentir las emociones como la gente común. Emociones humanas intrínsecas como el amor, la consideración y la compasión.

Lloyd pudo mantener la posición de la familia más rica del Imperio, solo persiguiendo a la lógica.

Pero las esposas de Lloyd estaban sedientas de afecto. Porque no tenían otro uso más que el de continuar con la línea familiar.

La atmósfera de la familia Lloyd, donde solo los capaces eran reconocidos y tenían el poder real, era fría y rígida de generación en generación.

—Eso no es propio de padre.

—Vaya, cuanto más débil es el cuerpo, más débil es la mente. Lo sabrás cuando envejezcas.

La madre de Cass se enamoró de su padre y quedó embarazada, pero finalmente eligió al Duque de Rockford en lugar de casarse con su padre. No fue bueno para Cass, pero fue una elección razonable para su madre.

—Padre.

Cass dijo mirando a su padre.

—La maldición.

Pensó que no podía ser. En el momento en que el pájaro, que había sido inútil y abandonado sin descanso, regresó y se enfrentó a una hermosa mujer que lo miró con frío reproche, su corazón crujió.