CAPÍTULO 3

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¡Hola precios@s!

¿Qué tal estáis? Espero que os esté gustando, me pondría muy feliz saber vuestra opinión. Dejadme un comentario, que con eso soy feliz.🥰

Bueno, ya dejo de enrollarme, aquí lo tenéis:

Al entrar, justo antes de girar a la izquierda para meterme en el baño de chicas, un chico sale del baño y no puedo evitar sorprenderme al ver que no tiene nada que lo cubra, salvo una toalla...

—¡Tú! —exclama.

—¿Perdona? —le respondo cortante.

—Me tienes que ayudar, por favor.

—¿Por qué debería ayudar a alguien tan maleducado?

—Es una larga historia, pero digamos que mi novia ha roto conmigo y me ha obligado a devolverle la ropa que me compró. Por suerte, el señor de la limpieza me ha dado esta toalla...

—Vale, ¿y yo qué pinto?

—Pues, me preguntaba si me podrías traer algo de ropa, lo que sea... Es que eres la única persona que ha entrado en estos baños desde que he venido.

—Está bien, ahora vuelvo —afirmo y me vuelvo a las sillas con Max.

—¿Ya estás? —me pregunta.

—Eh, no. Me ha surgido algo. Me tengo que llevar esta maleta —respondo cogiendo una de ellas.

—Vale, ¿necesitas mi ayuda?

—No hace falta, enseguida vuelvo.

—Vale —dice y vuelvo al baño.

—No sé si me quedará bien algo de lo que llevas ahí...

—No te preocupes, te dejaré mi ropa deportiva —aseguro.

Abro mi maleta y saco mis pantalones de chándal grises y una camiseta básica negra.

—Gracias, ahora vuelvo —se retira al baño y al cabo de unos segundos sale con la ropa puesta.

—Sabía que te iba a quedar bien.

—Muchas gracias. Por cierto, ¿cuál es tu nombre?

—Soy Lilian.

—Me gusta.

—Vale, creo que me tengo que ir ya, en nada sale mi avión...

—El mío también.

—¿A dónde vas?

—A Argentina, ¿tú?

—También.

—¿Quieres ser mi compañera de avión?

—No, gracias, tengo que entrar. Si me disculpas... —afirmo y entro en el baño de chicas por fin.

Al salir, lo veo apoyado en la pared de enfrente...

—Joder, si que tardas en mear...

—Ni que te hubiese pedido que me esperaras.

—Lo sé, pero quería hacerlo porque no te he dicho mi nombre.

—No me importa, tengo que irme...

»Digo e intento salir por la puerta pero su mano me detiene agarrándome por la muñeca y arrastrándome hacia el interior.

Una vez me tiene dentro, me acorrala contra la pared y me susurra al oído su nombre:

—Me llamo Sean Loden.

Se separa muy despacio después de hacer que me estremezca y ocurre lo que temía que pudiera pasar en cuanto me ha acorralado...

¡Hasta la próxima 🥰!

Multimedia: Sofía Moreno como Lilian Martín González

CON LA LUZ DEL MEDIODÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora