CAPÍTULO 63

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¡Hola a todos! Aquí va un nuevo capítulo, espero que os guste 💕🫶🏻🥰

—Creo que deberíamos ir a comer algo, ¿te parece un buen asado argentino?

—¡Claro! —exclamo—. Aunque si te soy sincera, me siento un poco cansada de andar con las muletas. Igual debería volver a la residencia...

—De acuerdo, te acercaré si es lo que deseas.

Yo hago un gesto confirmando que deseo irme ya. Realmente la pierna no me duele en exceso, pero estoy algo cansada... Cogemos un taxi y aunque le insista para irme sola, él no lo permite y me acompaña, cosa que es de agradecer.

—Ian, por favor, déjame pagarte el vestido...

—Es lo mínimo después de lo de anoche...

Tras oír eso mis ojos se abren como platos. ¿Acaso pasó algo entre Ian y yo?... Los recuerdos de estar en su sofá pasan por mi mente, pero ninguno más. ¿Me acosté con él?... Aunque la idea no me disgusta, veo que él empieza a reírse de manera estruendosa.

—Me refiero —se frena para seguir riendo—... Al vómito... Vomitaste dos veces señorita. Y una de las veces manchaste la manga de mi camisa. Hay que beber con moderación...

—¿De verdad? ¡Lo siento mucho! —me disculpo avergonzada de lo que hice y de pensar mal...

Luego me quedo callada y hay un silencio un poco incómodo entre ambos. Lo bueno es que enseguida estamos en la sede de la BE. Todos están saliendo de clases hacia el comedor con sus uniformes blancos y grises. De pronto, me entran ganas de comer ahí. Ian me quiere acompañar hasta la habitación, pero me da vergüenza que vea que estoy en la residencia masculina, así que al cruzarme con Aron el mexicano, veo mi oportunidad...

—¡Aron! ¡¿Qué tal las clases de fonética de hoy?! —le pregunto "entusiasmada", llamando su atención y provocando que se aproxime.

—La neta, la seño María hizo que estuviera padre. ¿Qué onda tu pierna?

—Pues algo mejor... Este es Ian, el mejor doctor de Buenos Aires —le señalo y ambos se estrechan la mano.

—Aron, ¿me acompañas tú a la residencia femenina? —anuncio guiñándole un ojo para hacerlo cómplice.

—¡Por su puesto lindura!

Me siento un poco incómoda todavía. Pero agradezco que Aron me vaya a acompañar.

—Ian, muchas gracias por lo de ayer y hoy. ¿Te veo en el hospital para la revisión del mediodía?

—Vale, ahí nos vemos mañana. Cuídate...

Pero antes de irse...

Hasta aquí el capítulo, gracias por leer🥰🫶🏻

CON LA LUZ DEL MEDIODÍADonde viven las historias. Descúbrelo ahora