¡Hola precios@s!
Aquí va el capítulo de hoy😉
—Ya sé que me quieres idiota, pero uno no dice lo que has dicho tú si no lo piensa realmente.
—Entiendo que estés enfadada, pero no acabes lo nuestro. No he querido decirlo...
—El que lo ha hecho acabar eres tú.
»Le contesto lo más serena que puedo y justo antes de salir hace algo que no es propio de él...
Me agarra por la cintura, me gira y me besa. Yo me zafo de él y salgo corriendo cogiendo la maleta que traía consigo, hasta que me doy cuenta de que la mayor parte de la gente que estaba sentada, ya no está. Menos mal que ahora la veo preparada para entregar los billetes y salir, por lo que, me coloco en la cola que se ha formado y espero unos pocos minutos hasta que me subo al avión.
Busco mi asiento asignado y me siento en el centro, junto a la ventana. Quien se sienta en mi fila (como no podía ser de otra forma) es Sean. Por suerte, no se ha percatado de que estoy a tan solo un asiento de él, separada por una abuela de pinta muy hippie.
Me quedo absorta recordando todo lo que acababa de pasar tan rápido que casi no me doy cuenta de que mi móvil está sonando.
Lo cojo y me alegra ver que es mi madre:
{Por teléfono}
—¡Hola cariño!
—Hola mamá —digo lo más animada que puedo.
—¡¿Ya has llegado a Argentina?!
—No, estamos esperando...
—¿Todavía? Bueno, ¡acuérdate de hacer muchas fotos!
—Sí, tranquila, pero aún faltan once horas para llegar...
—Sí, ja, ja... Es que estoy ansiosa... ¿Tú no? Te oigo un poco apagada... Si no querías ir, haberlo dicho...
—No mamá, tranquila. Es solo que...
—¡¿Estás bien?!
—Bueno...
—¿Qué te pasa? No me asustes...
—Max y yo hemos roto.
—¿En serio? ¿Por qué?
—No quiero hablar de ello ahora, pero no quiero verlo nunca más...
—Tú tranquila, seguro que lo arreglaréis si tenéis que arreglarlo... Y sino... Pues otro... Será que no hay... Yo, mientras estés feliz, ya sabes que me adapto...
—Lo sé. Gracias mamá.
—De nada...
—Cuando llegue te llamo que ya se mueve, adiós mamá...
—Adiós.
{Fin de la llamada}
Pasan unos minutos y por fin, después de tanto recorrido para poder despegar, nos encontramos elevándonos hasta el cielo y opto por contemplar el paisaje con los auriculares puestos.
—Disculpame chica, pero no pude evitar escucharte... ¿Te encontrás bien? —inquire la abuela hippie.
—...
Espero que os haya gustado 😊
ESTÁS LEYENDO
CON LA LUZ DEL MEDIODÍA
Short StoryTodo comienza cuando gano una beca para irme a estudiar a Argentina. Tengo un novio perfecto... Las metas claras... Mi vida encaminada... Pero, a veces, los planes que tenías para tu futuro, acaban por descubrirte tu verdadero destino... Y EL MÍO SI...