Capítulo cuarenta y nueve. "Pido perdón, no era yo era el Vodka."

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Jenna abre los ojos con sorpresa mientras se lleva una mano a la boca. Y yo salgo despistadamente a buscarlo, unos invitados ya lo han sacado del agua así que solo lo sentamos en una esquina.

– ¡Aquí no ha pasado nada! – grita alguien y todos regresan la mirada al altar.

– Tengo que estar ahí, pero volveré y hablaremos de esto ¿Pueden cuidarlo? – le digo a un señor y este asiente, regreso a mi lugar y la ceremonia termina con éxito.

Todos aplaudimos escandalosamente y después corro de regreso a ver a Eros, el se mantiene en su silla. Feliz y contento.

– Hola. – me saluda con una sonrisa.

– ¿Por que has hecho eso? – comienzo a reír y se sacude el cabello, ocasionado que un par de gotitas caiga sobre mi.

– Es que no te quería perder. ¿Escuchaste mi canción? – pregunta mientras sobre su nariz y trata de alisarse el traje, pero es torpe y solo lo desarregla más.

– ¿Por que me ibas a perder? – cuestione con una estúpida sonrisa en mi rostro.

– Porque pensé que era tu boda. – admite, apenado.

– Eros.. – niego con la cabeza y comienzo a reír.

– ¿Puedo preguntar quien fue a interrumpir mi boda? – exclama con cierto disgusto falso Jenna.

Mi mejor amiga parecía una princesa sacada de un cuento de hadas.

– Eh, ¿No eres Lisa Halls? – Eros abre los ojos con exageración y después regresa la mirada a mi y frunce el ceño. – No entiendo. – comenta apenado.

– Eros Ivanov, ella es Jenna Parker. Mi mejor amiga y no es la hermana de Spiderman. – confieso con una risita nerviosa.

– Lamento haberte mentido ese día, estaba enfadada por lo que le hiciste a mi mejor amiga. – se encoje de hombros. – Y mi hermano si se llama Peter Parker. – me codea discretamente y yo comienzo a reír.

– ¿Quién es el infiltrado? – llega a nuestro lado Ronnie. – ¿Las esta molestando? – cuestiona con rudeza.

– No puedes ni mantener a raya tus problemas estomacales, no creo que puedas mantener a raya a Eros. – responde obvia Jenna.

– Lamento venir a interrumpir tu boda, Jenna. Pensé que An se casaría y tenía que hacer algo para evitarlo...Lo lamento. – exclama apenado y una sonrisa se cuela en mis labios. – Pero es que yo leí en tus apuntes "Preparativos de boda" se excuso Eros.

– Jenna tuvo un accidente hace relativamente poco, necesitaba un par de manos extras que le ayudaran con todo. – sonreí.

– A demás, tu siguiente meta es ser diseñadora de eventos, te conviene practicar. – sonríe Jenna y y yo rio.

– Quería ser diseñadora de interiores. – ahora todos reímos.

– Oh dios mío, ¿Por que te has colado a otra boda? ¡Nos habías preocupado! – un chico bastante algo moreno con rasgos definidos, cejas pobladas, ojos marrones y cabello teñido a rubio llega exasperado a nuestro lado y regaña al pelinegro de ojos extraños.

– Ethan, ella es Anelisse y no se va a casar. – dice Eros señalándome, yo sonrió y agito la mano para saludar.

– ¿Sirvió la canción? – pregunta Ethan.

La canción, aun no me creía que Eros hubiera compuesto una canción y que la hubiera cantado en televisión nacional solo para decirme que no me uniera a alguien que no me producía la misma emoción como si fuera la primera vez.

EL MAR TATUADO EN TU PIELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora