Capítulo 52

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Allison:

—No puedes irte.

—Dylan...

—Shepard, tú me dices Shepard, son escasas las veces que me llamas por mi nombre, solo cuando estás enojada ¿Estás enojada?

—Claro que no.

—Entones dime como siempre me dices y no te vayas.

—Tengo que irme.

—No tienes qué —dice levantándose, yo también lo hago.

—Sí, tengo, y lo sabes.

—No, no sé nada, no quiero saber, no quiero que te vayas.

Me acerco a él y respiro hondo tomando su rostro para que me mire. Esto duele, pero debo hacerlo.

—Tengo que irme, tengo que sanar y estar bien, realmente bien. Tú mejor que nadie sabe lo rota que estoy y no puedo seguir así.

—Pero puedes sanar aquí... conmigo.

—No puedo hacerlo aquí, no con todas las cosas que pasaron, cada paso que doy me trae un nuevo recuerdo que me mata por dentro.

—Entonces déjame ir contigo.

—No, Shepard, estás avanzando y dentro de poco te vuelves el dueño de la empresa, no voy a hacerte esto, tu perteneces aquí, yo no.

—Sí perteneces aquí, perteneces conmigo.

—No lo hagas más difícil por favor —digo sintiendo como las lágrimas nublan mi vista.

—No quiero que te vayas, no quiero que me dejes —dice con los ojos cristalinos como yo—. Se supone que debemos reconciliarnos, que yo te perdone y luego tú a mí o al revés, como sea, pero volver a estar bien para tener las reconciliaciones que no incluyen ropa y volver a estar juntos... no... no puedes hacer que todos los escenarios que tenía se esfumen.

—Escúchame —digo volviendo a sostener su rostro y limpiando con mi pulgar una lágrima—. No sabía lo triste que estaba hasta que te conocí, Shepard. No sabía hace cuanto no sonreía tanto de verdad hasta que llegaste. Con tu amor me hiciste sentir, algo que había dejado de hacer hace tiempo.

» Con tu presencia me ayudabas a respirar, a querer levantarme todos los días porque sabía que iba a verte y te ibas a poner igual de contento que yo. Me hacías tener ganas de seguir de pie. Tú me salvaste, Shepard. Me salvaste de volver a caer.

—Solo haces que quiera retenerte más con eso —dice con una pequeña sonrisa.

—No importa cuánto tiempo pase, Shepard, lo que siento por ti jamás va a cambiar o disminuir.

—No puedo amar a otra persona, Allison, ocupaste todo el espacio en mí. Es por eso que cuando nos reencontremos, vamos a volver a estar juntos, no me importa si estás de novia, casada, viuda, lo que sea; si hace falta te reconquisto.

Río suavemente.

—No importa cuánto tiempo pase, no va a hacer falta reconquistarme porque no voy a amar a nadie con la intensidad con la que te amo, Shepard, siempre voy a amarte, aunque no nos volvamos a ver.

—No digas eso porque sí nos vamos a volver a ver y cuando lo hagamos, no voy a dudar en inclinarme en una rodilla y pedirte que me dejes pasar el resto de mi vida a tu lado, bonita.

—De acuerdo —digo suspirando—, pero no te arrodilles que me parece demasiado cursi.

—Ahora voy a hacerlo con más razón, solo para molestarte.

Suspiro de AlivioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora